La empresa de transporte El Corcel SA UTE, responsable de las líneas 4 y 102 en la provincia, tomó la decisión de despedir a su conductor, Daniel López, después de que este se viera envuelto en una controversia relacionada con las condiciones técnicas de uno de los colectivos de la compañía.
El incidente comenzó cuando López grabó un video en el que denunciaba problemas en una de las unidades, señalando que «la dirección se cortó» y que, de haber conducido cinco minutos más, «nos matábamos todos». Las imágenes se difundieron rápidamente en redes sociales y medios locales, lo que incrementó la atención sobre el caso.
En el video, el chofer expresaba su preocupación por la falta de mantenimiento, comentando que le asignaban «cualquier ómnibus» y que no había repuestos disponibles. Agradeció haber tenido suerte tanto él como los pasajeros, evitando un accidente mayor. También describió que el volante del colectivo «estaba loco» debido a la falla mecánica.
Salvador María del Carril, apoderado de El Corcel, confirmó que el contrato de trabajo de López fue terminado mediante una carta documento, argumentando que el empleado había actuado de mala fe y había causado un daño innecesario a la empresa. En el documento, la compañía sostuvo que el video grabado por López el 27 de julio de 2024, a raíz de una falla mecánica en la unidad que conducía, fue difundido con declaraciones falsas y generó una fuerte repercusión pública en los medios de prensa provinciales y nacionales.
El Corcel calificó de «falaz» la acusación de López sobre la supuesta falta de repuestos y mantenimiento en los colectivos, argumentando que esto no solo perjudicó la credibilidad y reputación comercial de la empresa, sino que también generó una polémica que afectó el servicio de transporte público en la provincia. La empresa también señaló que, con 30 años de antigüedad en su puesto, López debía conocer que todas las unidades cuentan con verificación técnica y mantenimiento adecuados.
La compañía acusó al conductor de haber provocado un «infundado temor público», poniendo en duda la seguridad del transporte que operan. Además, en la carta documento, subrayaron que el comportamiento de López violó el principio de buena fe y lealtad hacia su empleador, principios que él debería haber respetado en su relación laboral.
Por su parte, López negó haber «viralizado» el video y, tras el incidente, solicitó una licencia por problemas de salud debido a la tensión generada por la situación. Mientras tanto, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) trató de ponerse en contacto con el chofer para discutir el conflicto, aunque no lograron obtener respuesta, según informaron desde el gremio.
Foto: Tucumandigital