La Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) se encuentra en estado de alerta, esperando las decisiones del Gobierno Nacional sobre las compensaciones tarifarias para el interior del país y buscando opciones de financiamiento para enfrentar el impacto de la inflación en el sector. Jorge Berretta, directivo de la entidad, expresó al diario La Gaceta, su preocupación y anticipó que esta semana será crucial en términos de definiciones.
La primera problemática a la que se enfrentan las empresas prestadoras del servicio de autobuses está relacionada con la cuestión salarial. Aunque el plazo para el pago venció en los primeros días hábiles de este mes, Aetat logró acordar con la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) una prórroga para cumplir con los salarios. Berretta destacó el «sentido común» del gremio liderado por César González, que aceptó dar un compás de espera comprendiendo la difícil situación financiera del sector.
Berretta reconoció que, más allá de las dificultades para cubrir los sueldos a tiempo, el sector enfrenta otras complicaciones financieras, ya que los ingresos diarios no son suficientes para cubrir el costo del gasoil.
El segundo punto clave para Aetat esta semana es el pedido de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap) al gobierno de Javier Milei para que cese la discriminación en perjuicio del interior en relación con las compensaciones tarifarias. Los empresarios buscan que el Gobierno Nacional replique la medida tomada en el área metropolitana de Buenos Aires y anticipe las compensaciones tarifarias para el resto del país.
Berretta enfatizó la importancia de recibir el mismo trato que se dio al AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) y expresó la preocupación de que el interior del país podría experimentar un efecto dominó de conflictos similares a medida que atraviesan su momento de mayor endeudamiento.
En relación con los subsidios provinciales, Aetat se reunió con la intendenta de la Capital, Rossana Chahla. Aunque no se dieron detalles sobre la reunión, los empresarios locales llevan tiempo solicitando contribuciones de las arcas municipales para la sostenibilidad del servicio público de pasajeros. Aetat sostiene que el precio del boleto se encuentra muy por debajo de los costos y permanece congelado hasta que el Concejo Deliberante autoriza un aumento, mientras que los gastos operativos y salariales aumentan con la inflación.
A pesar de los subsidios enviados por la Casa de Gobierno, que fueron publicados en el Boletín Oficial, los empresarios señalan que el déficit operativo es constante y se agrava debido a la inflación. Sin nuevas fuentes de recursos, la crisis económica podría llevar a medidas que afecten la prestación normal del servicio.