El proceso judicial contra el ex gobernador y senador por Tucumán, José Alperovich, por presuntos delitos de abuso y violación contra su sobrina y ex colaboradora entre 2017 y 2019, iniciará el 5 de febrero según la resolución del Tribunal Oral número 29. Este tribunal convocó a una extensa lista de 81 testigos, incluido el senador Juan Manzur, para brindar testimonio en el juicio. El juez Juan Ramos Padilla, a cargo del caso, implementó una serie de medidas como parte de la «instrucción suplementaria» previa al juicio, incluyendo pericias judiciales en algunas propiedades de Alperovich.
Las acusaciones incluyen tres eventos de abuso sexual, dos en grado de tentativa, y seis de violencia sexual agravada con acceso carnal, supuestamente ocurridos en las oficinas de Alperovich en Tucumán y la Ciudad de Buenos Aires. El expediente se inició en 2019, pero Alperovich fue citado a declarar en 2022, negando su responsabilidad en los hechos.
El ex gobernador solicitó ser juzgado por un jurado popular, basándose en una norma que rige en la Ciudad de Buenos Aires, pero esta petición fue rechazada por distintas instancias judiciales. Entre las medidas solicitadas por el juez Ramos Padilla, se encuentran las anotaciones de la perito psicológica Mónica Herrán y el rechazo de la defensa para realizar una nueva evaluación psicológica a la víctima.
En caso de ser hallado culpable, Alperovich podría enfrentar una pena de hasta quince años de prisión. A pesar de sus 68 años, no podría solicitar detención domiciliaria, ya que este beneficio se otorga a partir de los 70 años en algunos casos de condena. La Corte Suprema de Justicia resolvió que todos los hechos debían investigarse en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 35 de la Ciudad de Buenos Aires, consolidando así la causa que inicialmente se tramitó en dos jurisdicciones.
Los fiscales Mariela Labozzetta y Santiago Vismara destacaron la importancia de evaluar el caso con perspectiva de género, describiendo los presuntos abusos como actos de violencia sistemática y repetitiva. Detallaron que los primeros abusos ocurrieron a mediados de diciembre de 2017 y persistieron hasta diciembre de 2018, resaltando el estado de cautividad de la víctima y su sometimiento a diversas formas de abuso.
