Devuelven a su propietario un terreno ocupado por diez personas en avenida Perón al 300

La Unidad Fiscal de Estafas, Usurpaciones y Cibercriminalidad II, bajo la conducción de Diego Hevia, llevó adelante una nueva instancia judicial en la que se reformularon cargos contra un grupo de diez personas, de las cuales seis son mujeres. La audiencia tuvo lugar el pasado martes y en ella la auxiliar de fiscal, Daniela Briz Tomás, respaldó el pedido presentado por la querella, que solicitaba la restitución de un inmueble ubicado en avenida Perón al 300, en Yerba Buena. La solicitud fue aceptada por el juez interviniente, autorizando así que el bien regresara a manos de su legítimo dueño.

Los acusados enfrentan imputaciones vinculadas a usurpación por alteración de límites y turbación de la posesión, delitos que se configuraron a partir de las acciones desplegadas en dicho terreno.

Durante la audiencia, desde el Ministerio Fiscal se sostuvo que: “Los actos posesorios de la víctima sobre el inmueble se encuentran acreditados, no existen dudas al respecto por las declaraciones testimoniales al respecto de los vecinos del lugar. Los imputados no pudieron corroborar o probar de ninguna manera que ellos tenían la posesión del inmueble en fecha anterior a la denuncia de la víctima”.

En esa misma línea, se recalcó que estaba plenamente probado que el denunciante era el verdadero poseedor del predio, y se advirtió acerca de la urgencia de poner fin a la situación: “Es el poseedor, quedó acreditado por la evidencia, y el peligro en la demora, ya que queremos hacer cesar los efectos de este delito, recuperar la posesión que perdió en manos de los imputados hace más de un año ya, con el perjuicio económico que tal acción ilícita le provoca”.

Construcción clandestina y trabajos de excavación

Uno de los hechos más relevantes incorporados en el expediente corresponde al 14 de octubre del año pasado, cuando los imputados habrían ingresado a la propiedad situada en la intersección de avenida Perón y República del Líbano. Allí realizaron excavaciones de gran magnitud, utilizando maquinaria específica y movilizando tanto a personas como a vehículos sin contar con ninguna autorización del propietario. Sobre este punto, la auxiliar de fiscal describió: “introdujeron maquinaria específica, con ingreso y egreso tanto de personas como de vehículos a tal fin sin la autorización de la víctima, con lo que turbaron de esta manera la posesión que éste ejerce sobre su propiedad en la ciudad de Yerba Buena, aprovechando la circunstancia de que al momento del ingreso el damnificado no se encontraba en el inmueble”.

No obstante, este no fue el único accionar atribuido al grupo. Según la investigación, entre los meses de junio y septiembre del mismo año, los acusados habrían actuado en conjunto, estableciendo un acuerdo de voluntades y dividiendo las tareas entre ellos, para levantar de forma clandestina una construcción de mampostería en el interior del terreno de la víctima. Esta maniobra habría modificado de manera ilegal los límites originales de la propiedad, constituyendo un nuevo episodio de usurpación.