Los trabajadores habían iniciado una medida de fuerza en el día de hoy. La secretaría de trabajo medió para llegar a buen puerto.
Durante la mañana del día jueves, el apoderado de la Empresa 9 de julio denunció el paro de actividades y la manifestación por parte de trabajadores del sindicato de camioneros que entorpecen el normal funcionamiento del servicio de recolección de residuos de San Miguel de Tucumán, imposibilitando así también el retiro de residuos patogénicos. Ante esta situación, la Secretaría de Trabajo decidió constatar la medida de fuerza y convocar a una urgente audiencia.
La audiencia se llevó a cabo en el día de la fecha y el sindicato solicitó a la empresa qué sean válidas las constancias de covid que emite el Siprosa, también que se abonara la jornada a los trabajadores que hicieron las medidas. La parte empleadora aceptó el requerimiento y solicitó que se suspenda la medida de fuerza.
Ante la dificultad para llegar a un acuerdo por las partes, se decidió desde la Secretaría de Trabajo dictar la conciliación obligatoria a fin de, en este ámbito, continuar con las negociaciones necesarias para sobre llevar el conflicto a una solución y tratar de que, a este servicio público esencial, se lo pueda prestar sin que la comunidad tenga que sufrir las consecuencias por el paro de actividades.
Dictada la conciliación obligatoria, que tiene un plazo de 15 días más 5 días hábiles,se tratará de solucionar el conflicto. Esta misma audiencia fue notificada a las partes y las mismas acataron la resolución de la secretaría trabajo.
El motivo central del reclamo fue que la Empresa se niega a pagar los días de aislamiento por diagnóstico clínico de casos confirmados de Covid-19. También el incumplimiento en las normas de higiene y seguridad, en el acondicionamiento de los camiones y sanitización de los mismos, entre otros reclamos.