El Gobierno está considerando la posibilidad de declarar a la educación como un servicio esencial, una medida que estaba contemplada en el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023, el cual fue suspendido por la Justicia. Manuel Adorni, vocero presidencial, anunció esta evaluación durante una conferencia de prensa. El DNU elaborado por Federico Sturzenegger proponía cambios en la ley laboral, incluyendo la educación como «servicio esencial» para limitar el derecho a huelga.
Según el artículo 97 del DNU, la educación de nivel inicial, primaria y secundaria, así como los servicios de cuidado de menores y la educación especial, serían considerados «servicios esenciales», lo que permitiría al Gobierno restringir el derecho a la protesta. Aunque no se ha especificado la fecha para la declaración, fuentes gubernamentales aseguran que será pronto y que la responsabilidad recaerá en la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Esta medida se da en medio de un conflicto salarial con los docentes, luego de que el Ejecutivo decidiera no convocar a una paritaria nacional. El Gobierno buscará exigir una prestación mínima en los días de paro, lo que ha generado preocupación entre los trabajadores de la educación.