La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, declaró hoy que el presidente Javier Milei se encuentra en un estado de calma, consciente de que las cosas están operando según lo previsto y confiando en que la mayoría de los argentinos están cumpliendo con sus responsabilidades laborales. Al llegar al centro de monitoreo en el Departamento Central de la Policía Federal, evaluó el paro llevado a cabo por la CGT, que incluye una manifestación en el Congreso Nacional.
Bullrich compartió que tuvo una conversación con el Presidente durante el día y tiene previsto reunirse con él en la tarde en Olivos. Enfatizó que Milei está sereno, convencido de que las actividades en el país están en marcha, respaldando sus afirmaciones con las imágenes recibidas desde diversas regiones argentinas.
La funcionaria hizo referencia a su visita al barrio de Flores, donde dialogó con comerciantes que expresaron su deseo de ver progresar al país y de continuar trabajando. Subrayó sus encuentros con trabajadores en una estación de servicio y una fábrica de amoníaco, donde todos estaban desempeñando sus labores, destacando la importancia de mostrar un país activo y productivo.
Bullrich manifestó su conformidad con la implementación del protocolo establecido por el Gobierno para este tipo de movilizaciones, asegurando que se está garantizando el flujo del tránsito. También informó que se impidió el paso a quienes intentaban cruzar el Puente Pueyrredón o la 9 de Julio.
En un mensaje anterior en la red social X, la ministra expresó que no hay paro capaz de detener al Gobierno, criticando la huelga de 12 horas convocada por la CGT. Apuntó hacia «sindicalistas mafiosos, gerentes de la pobreza, jueces cómplices y políticos corruptos» que resisten el cambio decidido democráticamente por la sociedad.
Bullrich lamentó la limitación del transporte público hasta las 19 horas, calificándola como una vergüenza y acusando al gobierno de organizar los colectivos para favorecer la asistencia a la movilización y dejar a la gente sin transporte para regresar.
La ministra también hizo referencia a denuncias recibidas por aprietes a más de 40 gremios para participar en la movilización, a través de la línea 134 habilitada por el Gobierno para dichas denuncias. Afirmó que estas denuncias se judicializan y que se han registrado más de 53,000 casos, destacando la presión ejercida sobre la gente antes del paro.
Concluyendo, Bullrich enfatizó que ni una marcha de 40,000 personas puede acorralar al Gobierno, considerando los 8 millones de cuentapropistas y 6 millones de trabajadores que optarán por cumplir con sus labores.