El juicio contra José Alperovich, por las acusaciones de abuso y agresión sexual realizadas por una ex colaboradora en 2019, ha puesto de manifiesto no solo estos hechos, sino también la forma en que se manejaban los recursos del Estado en Tucumán durante esos años.
Durante las 15 jornadas del juicio, que comenzó el 5 de febrero, se han mencionado varias prácticas relacionadas con el uso de recursos estatales en la provincia. Por ejemplo, Alperovich admitió que utilizó el avión oficial de la provincia “prestado” por el ex gobernador Juan Manzur, para un viaje a Buenos Aires en diciembre de 2017, en el que también viajaron la denunciante, el ex ministro Jorge Gassenbauer y Dante Loza, actual interventor del IPLA.
Además, Alperovich reconoció que la joven ingresó a la administración pública por una gestión suya, trabajando en el Archivo Histórico y luego en el Ministerio de Gobierno. También se refirió a cómo la joven comenzó a trabajar en su espacio político durante la campaña electoral de 2019, a pesar de que era empleada de Regino Amado en el Ministerio de Gobierno. Alperovich señaló que, debido a un conflicto con Manzur, tuvo que «inventar» candidatos para poder presentarse a la elección.
Alperovich también mencionó que la mayoría de las personas que trabajaban con él eran empleados estatales a los que Manzur les ordenó volver a sus puestos de trabajo y dejar de colaborar con él. La única que decidió renunciar y seguir militando con Alperovich fue la joven que luego lo denunciaría. Como Alperovich no podía pagarle, lograron que fuera contratada como asesora en el Senado a través de Beatriz Mirkin, otra senadora de su espacio.
Por último, Alperovich afirmó que todos aquellos que se acercan a la política buscan terminar teniendo un cargo, y puso el ejemplo de la denunciante, a quien acusó de armar una maniobra política para desprestigiarlo porque él no la puso en la lista de candidatos a legisladores, a pesar de que, según él, era a lo que realmente aspiraba./Fuente:La Gaceta