«En los últimos 10 años se han perdido 1.000 empresas y 15 mil puestos de trabajo privado en Tucumán»

Roberto Sánchez y Germán Alfaro, hicieron críticas de gestión al actual Gobierno provincial y anticiparon algunas de sus propuestas de cara a la próximas elecciones de mayo, en una entrevista con el diario La Gaceta.

«En los últimos 10 años se han perdido casi 1.000 empresas en Tucumán; son casi 15.000 puestos de trabajo en la actividad privada. Y se ha ido incrementando a su vez el empleo público», expresó el diputado radical. Y, si bien advirtió que no están en «desacuerdo con que alguien trabaje para el Estado», consideró que la clave está en «fomentar el empleo privado». «Tenemos que ponerles alfombra roja a quienes quieren invertir en la provincia, disminuyendo impuestos e incentivándolos para que se puedan instalar”, consideró el presidente de la UCR de Tucumán, Roberto Sánchez.

Mientras Alfaro consideró que «el empleado que cobra del Estado tiene que trabajar». En esa línea, objetó que, mientras «las escuelas no tienen conserjes», la planta de asesores del Poder Legislativo hace que «sobren» las personas con relación al edificio de Muñecas al 900. “No podemos tener una Legislatura con $ 34.000 millones de presupuesto”, expuso. Y advirtió que sólo «la clase dirigente» satisface sus necesidades, en contraposición con lo que sucede con la ciudadanía. «Por eso existe el divorcio con la gente”, dijo. Y, como candidato a vicegobernador, insistió con que se “tiene que bajar el presupuesto de la Legislatura”.

«En Tucumán existe una presión impositiva muy grande: de toda inversión que realizas el 35% se lo lleva el Estado”, afirmó el intendente de la Capital. Y consideró clave eliminar la carga tributaria, por ejemplo, derogando el Impuesto a la Salud Pública. “No quiere decir que se va a sacar todo de un día para el otro, ni a desfinanciar el Estado. Pero presionar impositivamente hace que nadie quiera invertir en la provincia. Se debe compensar y equilibrar”, analizó el líder del PJS.

Sánchez, en tanto, aseguró que «el orden de prioridades» que fija el gobierno del PJ-FdT «es distinto» a  lo que requiere la ciudadanía. Y puso como ejemplo el drama que atraviesa el sector agrícola-ganadero por la sequía. «Las distribución de riego están rotas, no hay mantenimiento de esos canales, y con eso se podría aumentar la productividad», planteó.

En esa línea, indicó que falta inversión en materia de caminos, tanto para la producción como para el traslado de la ciudadanía. «Son obras que están faltando», aseveró el radical. Y añadió que «hace 20 años que estamos estancados en materia de obras públicas».

Alfaro tomó la palabra luego para enrostrar al gobierno de Juan Manzur y Osvaldo Jaldo la falta de concreción de los proyectos comunicados en la última década. “¿Dónde está el Centro Cívico, que se compró el terreno y se anunció con bombos y platillos? ¿Dónde está el Centro de Alto Rendimiento de Tafí del Valle? ¿Dónde están las 7.300 viviendas, que todavía vemos los carteles en la vía pública?”, enumeró el intendente.

Además, coincidió junto a Sánchez en criticar al Gobierno provincial por la gestión de la obra de la autopista entre San Miguel de Tucumán y Las Termas de Río Hondo, por la cual se reunieron recientemente representantes de la empresa contratista y del Gobierno nacional para asegurar los continuidad de los trabajos. «Algún trámite tienen que haber hecho mal para que la obra no avance», indicaron.

Por otro lado, Alfaro puso el foco en la entrega de fondos mediante los Aportes No Reintegrables a los municipios afines a la Casa de Gobierno, y planteó que tales recursos no se plasman en inversiones en esos distritos. “Yo no los veo a los $ 5.000 millones en Banda del Río Salí», ejemplificó.

En otro tramo de la entrevista, la fórmula de JxC hizo un balance negativo de la gestión por parte de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT). En este marco, Sánchez recordó que prácticamente la totalidad de las acciones de la sociedad anónima de participación estatal mayoritaria «pertenecen a la provincia» y, por lo tanto, «es su responsabilidad».

«Hoy por hoy, la SAT hace agua por todos lados, vemos los distintos problemas, tanto en proveer agua como en la pérdida de cloacas”, analizó el radical.

E insistió en que la empresa «no está funcionando», no sólo en la Capital, sino también en los distritos del interior. «Los líquidos cloacales corren hace años por las calles y no tienen arreglo”, cuestionó.