Este jueves se reveló que Esmeralda Mitre ha sido internada de urgencia en una clínica de Buenos Aires debido a un grave problema de salud mental. La información fue difundida en el programa LAM (América), donde se compartieron detalles preocupantes sobre su situación actual.
Yanina Latorre, quien ha estado siguiendo de cerca el estado de la actriz, ofreció una descripción exhaustiva de los problemas que enfrenta Mitre. Según Latorre, «Esmeralda está actualmente en una clínica, aunque no es especializada en salud mental; esa será su próxima etapa. Mientras estaba en la clínica, ocurrieron incidentes graves: sus abogados, tanto el de ella como el de su madre, se enfrentaron físicamente, y su pareja le robó el auto».
Latorre también contextualizó la complicada situación personal y familiar de Mitre, mencionando conflictos previos con los vecinos del edificio donde reside, incluyendo disputas públicas y problemas de pago de expensas. Esta serie de conflictos contribuyó a su situación actual, según la periodista.
La situación de Mitre se describe como alarmante: «Esmeralda ha caído en una situación casi de indigencia. No tiene empleo y no parece existir la herencia que ella mencionaba. Se ha sumergido en una especie de locura, atrapada en una relación tóxica con Paolo Vianini, marcada por malos tratos y violencia. Además, su consumo de drogas se ha intensificado, como lo ha declarado su madre en los tribunales. Esmeralda está vendiendo sus pertenencias para financiar su adicción, y actualmente no cuenta con servicios básicos como gas o agua caliente, ni siquiera tiene comida», detalló Latorre.
La situación ha llevado a la madre de Esmeralda, Blanca Isabel Álvarez De Toledo, a presentar un documento legal con un relato desgarrador. En el testimonio, leído por Latorre, se describe la desesperación de la madre: «Estoy desesperada y no sé qué hacer. Mi hija está al borde de la muerte y no lo reconoce. Está a punto de perder su departamento, lo cual es secundario en comparación con sus problemas. Ha acumulado deudas debido a su estilo de vida y no puede detener el consumo de drogas».
El documento también señala que Mitre está rodeada de personas que también consumen drogas, lo que agrava su situación: «No tiene comida, y un amigo y yo le llevamos alimentos, pero hemos dejado de darle dinero porque lo gasta en drogas. Le han robado cosas que luego venden, y vive en condiciones deplorables y peligrosas».
La madre de Mitre hace un último llamado a las autoridades: «Pido desesperadamente que me ayuden a evitar que mi hija muera y asumo la responsabilidad de este pedido».