El ex gobernador de Tucumán, José Alperovich, ingresó en la madrugada de ayer a la cárcel federal de Ezeiza, una de las unidades de máxima seguridad del país. Según una fuente del Servicio Penitenciario Federal (SPF) que acompañó de cerca su llegada tras la condena a 16 años de prisión por abuso sexual y violación de su sobrina, Alperovich se mostró ansioso debido a las circunstancias de su detención. No solicitó nada en particular, pero sí se interesó por las visitas y los trámites necesarios.
Inicialmente, Alperovich está alojado en el hospital penitenciario de Ezeiza, donde permanecerá entre una semana y diez días, conforme al protocolo estándar. Durante este tiempo, se le realizarán exámenes médicos de rutina, como análisis de sangre y radiografías, así como estudios más detallados para evaluar su estado de salud y determinar si necesita algún tratamiento específico. La defensa ya ha informado que presentará su historia clínica para estos exámenes.
Con los resultados de estos estudios, se decidirá su ubicación permanente dentro de la prisión, según su perfil y los delitos por los que fue condenado. Si no hay impedimentos médicos ni órdenes judiciales en contra, será trasladado a un pabellón común. La opción principal es el pabellón del programa del SPF para ofensores sexuales. En caso de que la condena quede firme, Alperovich podría ser trasladado a la unidad de Senillosa en Neuquén, especializada en delitos sexuales, aunque eso será una decisión posterior.
No se ha dispuesto ningún cuidado especial para Alperovich, tratándose de un preso más, aunque el SPF reconoce la alta repercusión mediática de su caso. Actualmente, la cárcel de Ezeiza alberga a dos mil internos y ha alojado a ex funcionarios públicos y personas vinculadas a la política, como el ex vicepresidente Amado Boudou y el empresario Lázaro Báez. En el pasado, formaron parte del programa de Intervención para la Reducción de Índices de Corruptibilidad (IRIC). También hay jefes de organizaciones criminales, como Esteban «Lindor» Alvarado, condenado por liderar la venta de drogas en Rosario.
Alperovich ya fue sometido a los primeros exámenes médicos y los resultados serán comunicados al juez Juan Martín Ramos Padilla. El tribunal informó al SPF que hoy recibirá la visita de sus abogados, encabezados por Augusto Garrido. Además, Alperovich puede recibir visitas; esta mañana, sus hijos estuvieron con él. Sara Alperovich, al llegar a la cárcel de Ezeiza, expresó a los medios: «La verdad es que es todo mentira y la verdad va a salir a la luz. Estamos pasando el peor momento que puede pasar alguien cuando es algo falso y cuando es algo injusto. Esto es tremendo. Estamos unidos como familia, mi mamá y nosotros los hijos, y como tanta gente que nos está apoyando».
Mientras esté en el hospital penitenciario, Alperovich solo puede recibir visitas de familiares directos en horarios y días más restringidos. Una vez que sea trasladado a un pabellón común, tendrá el régimen de visitas habitual de todos los internos.
José Alperovich, quien fue gobernador de Tucumán en tres ocasiones, fue condenado a 16 años de prisión por tres hechos de abuso sexual y nueve violaciones contra su sobrina, quien trabajó con él entre 2017 y 2019 como secretaria privada y en la campaña electoral de 2019. El fiscal Sandro Abraldes había solicitado una condena de 16 años y medio de prisión, mientras que los abogados del Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico a Víctimas de Delitos de la Defensoría General de la Nación, Carolina Cymerman y Pablo Rovatti, habían pedido una pena de 22 años.
El juez Ramos Padilla concluyó que Alperovich cometió los delitos mediante intimidación, abuso de relación de dependencia, poder y autoridad, y ordenó su inmediata detención y traslado a una unidad del Servicio Penitenciario Federal, como lo habían solicitado la Fiscalía y la querella debido al riesgo de fuga.