Tras permanecer once días en estado crítico, Pablo Exequiel Silva, un joven de 28 años, mostró una leve pero esperanzadora mejoría el miércoles 6 de agosto, cuando abrió los ojos en el Hospital Padilla de San Miguel de Tucumán, donde permanece internado desde el 26 de julio. Su hospitalización fue consecuencia de una brutal golpiza sufrida en plena vía pública, hecho que conmocionó a toda la provincia.
Según relataron sus familiares, Silva ya no depende del respirador artificial, respira por sus propios medios y, aunque presenta episodios de confusión debido a las secuelas del grave trauma, ha logrado reconocer a sus hijos, a su pareja y a sus hermanos. También tiene breves momentos de lucidez y expresa el deseo de retirarse del hospital y liberarse de los aparatos médicos. Este despertar constituye el primer signo claro de evolución positiva desde el violento episodio, aunque su estado continúa siendo grave.
Actualmente, permanece en la unidad de terapia intensiva, donde recibe atención constante debido a múltiples lesiones: fracturas faciales, un traumatismo encéfalo craneano severo y un derrame pulmonar en el lado derecho. Los médicos controlan su evolución de manera permanente, atentos a cualquier cambio en su cuadro clínico.
El ataque y sus circunstancias
El hecho ocurrió el sábado 26 de julio, cerca de las 18:00, en la esquina de avenida Roque Sáenz Peña y Lidoro Quinteros, en la ciudad de Juan Bautista Alberdi. Según las investigaciones, Silva fue perseguido por otro hombre y golpeado con extrema violencia, incluso cuando ya estaba en el suelo. El ataque quedó registrado en un video que rápidamente se difundió en redes sociales, causando indignación generalizada.
Pocas horas más tarde, se conoció otra grabación tomada minutos antes del hecho, donde se ve que Silva le asesta un golpe de puño al agresor. Sin embargo, la desmedida reacción posterior fue duramente repudiada por la comunidad.
La causa judicial
A raíz de la investigación, la policía detuvo a Lucas Ismael Espeche, de 30 años, acusado de ser el autor de la golpiza. La fiscalía lo imputó por homicidio simple en grado de tentativa.
El 30 de julio se llevó a cabo en el Centro Judicial Concepción la audiencia de formulación de cargos. La auxiliar fiscal Gabriela Ghilardi, en representación del fiscal Miguel Ángel Varela, solicitó prisión preventiva por 90 días, argumentando riesgo de que el acusado pudiera entorpecer la investigación, ya que aún faltaban declaraciones de testigos clave. La jueza a cargo concedió la medida.
En esa misma instancia, declaró como testigo Ricardo Osvaldo Moreno, quien aseguró haber sido agredido por Espeche minutos antes del ataque a Silva. Este testimonio refuerza la hipótesis de que el imputado estuvo involucrado en más de un episodio violento en el transcurso de esa jornada./Fuente: Noticiasdelinterior
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