Además de condenar a prisión perpetua a cinco de los rugbiers y a 15 años de prisión a otros tres, el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de la ciudad de Dolores ordenó este mediodía que se investiguen a Juan Pedro Guarino y a Tomás Colazo, por los delitos de falso testimonio
Los jueces María Claudia Castro, Emiliano Lazzari y Christian Rabaia hicieron lugar al planteo de la fiscalía para que se extraigan copias de la causa y se inicie una investigación para establecer si los dos rugbiers que no fueron sometidos a juicio cometieron falso testimonio.
Guarino y Colazo habían sido parte del grupo de rugbiers que estuvieron en la noche en que fue asesinado Fernando Báez Sosa. Sin embargo, habían sido absueltos por la justicia al no poder probarse que participaron de manera activa dentro de las tareas del grupo que derivaron en el homicidio.
Si bien la absolución significa que el tribunal los considera inocentes del homicidio, la participación que realizaron en el juicio dejó varias dudas y motivó a que la fiscalía pida que se investigue si incurrieron en falso testimonio para tratar de ayudar a la situación de sus amigos.
