“Se adquirieron seis nuevos desfibriladores para prevenir situaciones de emergencia cardiovascular. Tres serán destinados al Estadio, y tres a nuestro Complejo Polideportivo”. El club San Martín de Tucumán anunció ayer con publicaciones en sus redes sociales, la compra de los equipos para sus instalaciones.
Sin embargo, el anuncio recibió varias críticas entre las reacciones en las últimas horas. No hubo cuestionamientos hacia la acción, sino porque se hizo público poco tiempo después de la muerte del jugador de Atlético, Andrés Balanta, por una afección cardíaca.
“Desfibriladores tenemos desde que esta comisión directiva está a cargo, como también seguridad (…) La idea concreta era llevar tranquilidad. Además, ya habíamos comprados los equipos (antes de la muerte del futbolista)”, expresó en una entrevista con LG Play el presidente de San Martín, Rubén Moisello.
“No comparto en absoluto y me parece una bajeza inmensa decir que era un burla hacia nuestro clásico rival, de Atlético. Sería muy perverso de nuestra parte. Es todo lo contrario, nos solidarizamos y adherimos al duelo”, añadió.