La situación en la Dirección General de Transporte de Tucumán se ha vuelto especialmente tensa en los últimos días, a raíz de una creciente oleada de reclamos por parte de personas con discapacidad que se acercan a diario a las oficinas de la Terminal Nueva con la esperanza de gestionar o renovar sus pases gratuitos para viajar en transporte público. Ante este panorama, Sergio Apstey, titular del organismo, admitió en una entrevista con el diario La Gaceta que los retrasos existen y que se están adoptando medidas específicas para intentar normalizar la situación.
Apstey explicó que desde hace varios días, y frente a la confusión generada en torno a los pases provisorios en formato de fotocopia, decidieron implementar un nuevo formato que refuerce la autenticidad del documento. “Desde la semana pasada, y debido a la confusión que se generó con los pases provisorios en fotocopia, comenzamos a entregar una tirilla a color con la foto del beneficiario y mi firma original”, señaló el funcionario. Esta iniciativa surgió como respuesta a la proliferación de documentos falsificados, una problemática que fue confirmada por el propio director: “Lamentablemente sí, se encontraron muchos certificados truchos”.
El conflicto alcanzó una nueva dimensión cuando, en medio del caos, algunas empresas del transporte público decidieron por cuenta propia impedir que los beneficiarios con pases provisorios abordaran los colectivos, situación que derivó en numerosos reclamos. Apstey aclaró que esa medida no fue consensuada con el gobierno y atribuyó la responsabilidad a decisiones unilaterales de las compañías: “Se trató de una decisión unilateral de algunas empresas, pero ya llegamos a un acuerdo con AETAT para que esos pases sean válidos hasta el 24 o 25 de este mes”, aseguró.
Por otra parte, el funcionario admitió con preocupación que la entrega de los pases definitivos también enfrenta demoras considerables. Según indicó, los carnés que actualmente se están distribuyendo corresponden a solicitudes realizadas hace más de un año: “Estamos entregando recién los de febrero o marzo del año pasado”. Apstey explicó que esta demora se debe a factores estructurales que dificultan el funcionamiento del área, entre ellos la falta de personal suficiente y la excesiva carga administrativa. Además, mencionó que parte del equipo de atención está conformado por personas con discapacidad, algo que valoró especialmente aunque reconoció que incide en los plazos de respuesta: “Es un área sensible, y además tenemos trabajadores con discapacidad que también atienden al público, lo cual valoramos mucho, pero es una realidad que nos complica los tiempos”.
En cuanto al volumen de usuarios que dependen de este servicio, Apstey detalló que hay aproximadamente 50.000 personas registradas en la base de datos de la Dirección, muchas de las cuales deben renovar sus beneficios periódicamente según las condiciones de vigencia de sus certificados. Para tratar de aliviar el colapso, se resolvió ampliar el horario de atención en la sede ubicada en la Terminal Nueva: ahora se atenderá de lunes a viernes, de 8 a 14 horas, tanto para recibir la documentación como para la entrega de los nuevos pases.
A modo de cierre, Apstey explicó que los pases provisorios que se están entregando en esta etapa no tendrán vencimiento hasta que se concrete el llamado oficial para la entrega del pase definitivo. “Queremos darles una solución lo antes posible. Sabemos que se trata de un sector muy vulnerable y no pueden quedar sin el beneficio”, subrayó, poniendo énfasis en la intención del organismo de evitar que ninguna persona con discapacidad quede excluida del sistema de transporte por cuestiones administrativas.