¿Quién es la azafata de vuelos privados que Alberto Fernández designó en la Casa Rosada?

En un conmovedor descargo, Fabiola Yañez insinuó haber sido víctima de múltiples infidelidades por parte de Alberto Fernández durante su relación. A lo largo de los cuatro años de mandato del ex presidente, circularon diversas versiones sobre sus presuntos amoríos. Una de las más comentadas se refiere a la inesperada contratación de una azafata que Fernández conoció durante un viaje en un chárter privado. Esta mujer, Grisel Tamborro, fue contratada en 2021 por la Secretaría General de la Presidencia, donde trabajó hasta febrero de este año, cuando fue desvinculada en el marco de los recortes implementados por Javier Milei.

Grisel Tamborro, una joven asistente de cabina de la aerolínea Flyzar, conoció a Alberto Fernández y a Julio Vitobello en un vuelo privado contratado por el gobierno anterior durante la pandemia de COVID-19. Antes de la adquisición del avión presidencial ARG 01 en marzo de 2023, la administración solía recurrir a vuelos privados o a Aerolíneas Argentinas para los desplazamientos de las comitivas oficiales.

Según ex compañeros de trabajo y fuentes oficiales consultadas por Clarín, Tamborro, de 32 años, fue asignada al área conocida como «Salones y Eventos» en la Dirección General de Servicios Generales. Durante su tiempo en esta área, tuvo varios conflictos, como uno con una funcionaria debido a su resistencia a recibir órdenes y por sus frecuentes ausencias justificadas por su otro empleo como azafata. «Incluso hubo una directora que intentó despedirla por cobrar horas extras sospechosas», señaló una fuente consultada. Posteriormente, fue trasladada a otra dirección dentro de la misma Secretaría General.

A pesar de estos problemas, Tamborro se mantuvo en su puesto, lo que muchos atribuyen a una supuesta «protección» especial. Dos incidentes en particular llamaron la atención de sus compañeros. En una ocasión, en 2021, fue llamada por un secretario de la «pre-privada» del Presidente, un hecho inusual para alguien en su nivel jerárquico. Además, defendió con éxito a un director despedido por Julián Massolo, el segundo al mando en la Secretaría General, logrando que el despedido fuera reubicado en la Cancillería.

Sin embargo, el hecho más revelador de su conexión con Alberto Fernández fue una visita que realizó a la Quinta de Olivos ese mismo año. A pesar de ser una empleada sin rango jerárquico, fue recibida por el Presidente en su residencia oficial. Según el registro de ingresos a Olivos, obtenido por Poder Ciudadano, Grisel ingresó el 31 de marzo de 2021 a las 21:00 para encontrarse con Fernández y se retiró a las 21:59. Fue la última visita que recibió el entonces mandatario esa noche, un encuentro «inusual» según un ex funcionario consultado, quien sugiere que pudo haber existido más que una simple conversación entre ambos.

Con el paso del tiempo, Grisel Tamborro continuó trabajando en la Casa Rosada hasta que fue afectada por las cancelaciones de contratos implementadas por la nueva administración libertaria. En febrero, dejó su puesto antes de la gran purga que tuvo lugar en la previa a la Semana Santa.

El actual gobierno ha optado por no involucrarse en este asunto, aunque el propio Javier Milei se pronunció al respecto en una publicación en X titulada «Ordenando los hechos». En ella, Milei afirmó: «La tercera en discordia ha sido beneficiada con un contrato cuya contraparte final es el Estado, ello constituye prostitución. Donde el problema no radica en el acuerdo de partes en sí, sino en que las acciones de AF estarían siendo soportadas/pagadas por los impuestos pagados por los argentinos». Milei se refería a la denuncia de Fabiola Yañez contra Fernández, quien supuestamente habría sido infiel con Cecilia Hermoso, ex directora de Comunicación Digital durante su administración.