Cada año, hacia finales de agosto, crece la expectativa en Tucumán por la llegada de la tradicional Tormenta de Santa Rosa, y este 2025 no es la excepción. La pregunta que se repite entre los tucumanos es si se concretarán las precipitaciones que marca la tradición. Al respecto, el especialista en clima Cristofer Brito comentó al diario La Gaceta que, aunque existe la posibilidad de lluvias, no se puede asegurar que se produzcan.
“¿Va a llover o no va a llover? Puede llover. No está asegurado, pero está la chance de que mañana por la noche tengamos algunas precipitaciones en algún punto de la provincia de Tucumán”, expresó Brito. Sin embargo, aclaró que aún es imposible determinar con precisión en qué zonas podrían registrarse esas precipitaciones. “No sabemos exactamente dónde, pero existe la posibilidad de que caigan algunas gotas durante la noche del sábado o la madrugada del domingo”, agregó.
La Tormenta de Santa Rosa tiene raíces históricas que se remontan al siglo XVII en Perú. La tradición cuenta que una fuerte tormenta frustró la invasión de piratas holandeses tras las oraciones de Santa Rosa de Lima, y desde entonces se asocia este fenómeno a finales de agosto en varios países del continente. No obstante, la situación climática en Tucumán y el norte argentino es distinta. Según Brito, la región suele atravesar esta época con condiciones muy secas y carece del principal elemento necesario para generar tormentas: la humedad. “Hace muchos años que en Tucumán no tenemos Tormenta de Santa Rosa, aunque sí suele darse en el este del país, más cercano al océano”, explicó.
Aun así, el meteorólogo destacó que cualquier precipitación sería bienvenida en la provincia, especialmente considerando la temporada seca y los problemas derivados de los incendios y el humo que afectan a la región. Aunque las probabilidades de lluvias no son altas, la mera posibilidad de que se registre algún chubasco mantiene la atención de la población puesta en el cielo tucumano.