El hecho trascendió en redes sociales luego de que la madre de la pequeña víctima publicará su descargo en redes sociales. Según sus dichos el pasado domingo asistió al Balneario municipal para disfrutar de un día en familia. Cuando se estaban retirando del lugar, uno de sus hijos pisó un vidrio que atravesó su zapatilla y se incrustó provocando un profundo corte en la planta del pie. Los vidrios se encontraban ocultos entre los pastizales por lo que la criatura no pudo verlos al caminar y resultó seriamente lastimado.
Ante la desesperación, la madre llevó al niño hasta la enfermería del balneario la cual se encontraba (siguiendo sus dichos) completamente vacía. En procura de que el menor reciba atención médica, la mujer consiguió trasladarse en un auto particular hasta el Hospital Parajon Ortiz, donde lo suturaron y tras eso regresar a su hogar en Santa Lucia.
Sin embargo, el vía crucis de la madre y su pequeño recién comenzaba. En la madrugada el pequeño comenzó a gritar del dolor, por lo que nuevamente su madre decidió llevarlo a un centro de salud, en este caso el hospital de Santa Lucía donde tras esperar media hora en la guardia no recibió ningún tipo de atención por lo que tuvo que costear nuevamente el traslado hasta el Hospital de Monteros, ya que su familia carece de un vehículo propio que les facilite la movilidad.
Ya en Monteros el pequeño fue atendido en la guardia por un pediatra y las enfermeras quienes tuvieron que administrarle calmantes para soportar el dolor. El día lunes, el niño fue atendido nuevamente en este nosocomio para el control de rutina descubriendo que había perdido la movilidad de unos de sus dedos por lo que se lo derivó con un traumatólogo quien deberá decidir si se trata o no de un caso que amerite una intervención quirúrgica.
En sus redes la mamá del niño, contó que tiene 3 trabajos para poder mantenerlo y que en solo 5 días lleva ya gastados $20.000 (uno de sus ingresos mensuales) en medicación y traslados. Además tiene un pequeño con Rosasia, cuyo tratamiento es costoso y mensual.
Lamentablemente el niño, perdió el turno con el traumatólogo ya que su mamá no pudo conseguir un medio de transporte y mucho menos disponer de los $8000 que necesitaba para costear un vehículo particular y la consulta con un traumatólogo. Ante la nula respuesta de las autoridades famaillenses solicita colaboración a la comunidad para ayudarse a costear los gastos que debe afrontar para que el niño reciba el tratamiento adecuado, ya que incluso para poder atenderlo debió disminuir su carga laboral «estos días seguí buscando hablar con alguien que se haga cargo de algo y nadie aparece, el sr intendente Orellana quedó en tomar cartas en el asunto y hasta ahora no aparece Nadie… Sigo con mí hijo de acá para allá sola»./Monterizos
