Un emotivo video en TikTok ya tiene más de 16 millones de reproducciones. Se trata de una imagen poco frecuente: un colibrí se posa sobre la cabeza de Flor Abraham, la autora del video, una joven de 20 años oriunda de la localidad bonaerense de Berazategui
Sin embargo, la historia tiene algunos condimentos que la hacen más interesante. Al sentir al pájaro en su cabeza, Florencia comenzó a llorar, porque lo sintió como una señal de su perra Guada que murió hace poco.

La perra, una labradora, fue la fiel compañera de la familia durante 14 años. En noviembre falleció después de dos años luchando contra un cáncer. En el medio del duelo y días antes de la aparición del colibrí la estudiante de Diseño Gráfico pidió “una señal para saber que estaba bien”.
En 25 de noviembre del año pasado, Guadalupe, una labradora de pelaje marrón claro, murió luego de luchar dos años contra un cáncer terminal que hizo metástasis. “Este es mi mejor recuerdo. Gracias, Guadita por volver a encontrarme”, escribió junto al video que ya cosecha cerca de 9 millones de reproducciones, más de 890 mil likes y 17 mil comentarios.
“Justo en ese momento tus energías positivas se equilibraron a tal manera que la inocencia del colibrí encontró seguridad en ti”, opinó una usuaria mientras que otro le recordó la leyenda: “Dicen que cuando los colibríes te visitan, en realidad, es una persona o animal que falleció y solo te está visitando, alguien te quiere”.
El 17 de diciembre, luego de unos días de mucha tristeza, el colibrí entró a su casa mientras ella estaba acostada. “Mi mamá me avisó para que lo viera”, le cuenta al portal Infobae. Lo que nadie de la familia sabía es que en silencio, mientras manejaba, ella le pidió a Guada que le diera una señal para hacerla saber que donde fuera que esté, estaba bien.
El cuerpito de la dulce perra, que a puro hocicazos obligaba a Flor a levantarse de la cama, quedó enterrado en el jardín de la casa y muy cerca Flor dejó un bebedero para colibríes. “Descubrí un nido, así que parece que hay una familia de ellos. Vi varios, no sé si ese día vino a ver si se sentía bien como quedarse acá, o qué, pero siguen viniendo aunque no identifiqué si es el mismo”, asevera.
