Tanto Zermatten como Sava tendrán la tarea de trabajar arduamente para intentar recuperar la mejor versión de un Atlético Tucumán y un Argentinos Juniors que anoche se presentaron de manera imprecisa en La Paternal.
Ambos equipos demostraron que merecían marcar goles, y, de hecho, pudieron haber anotado varios. Con la urgencia de volver a conseguir una victoria, Atlético salió decidido desde el primer momento. Jugadores como Renzo Tesuri, Sánchez y Bajamich lograron crear varias jugadas de ataque por el flanco derecho, que fue donde la defensa de Argentinos mostró debilidades.
Sin embargo, Atlético no pudo capitalizar esas oportunidades. La realidad es que el equipo no es el mismo que hace algunas fechas. Lo que antes se convertía en gol fácilmente, ahora se traduce en tiros que impactan en el palo o se desvían de manera desafortunada. Es probable que Sava, en su análisis, se centre en encontrar respuestas a una notable disminución en la posesión y efectividad que el equipo ha evidenciado en las últimas cinco jornadas: han pasado de estar invictos durante nueve partidos (con cuatro empates y cinco victorias consecutivas) a enfrentar un panorama complicado, con cuatro derrotas en los últimos cinco encuentros, dejando sólo una victoria y el empate de ayer como consuelo tras la cantidad de ocasiones desperdiciadas que podrían haberles otorgado la victoria.
A medida que avanzaba el partido, Argentinos comenzó a ganar protagonismo. En cuanto a su desempeño, el saldo es positivo: tras unas pocas fechas en la era post-Guede, el interino Cristian Zermatten, quien ha sido confirmado en su cargo hasta fin de año, ha logrado corregir el déficit que el equipo enfrentaba. Sin embargo, aún le falta ese “algo” que le dé mayor chispa a su juego, que avanza de manera lenta. A diferencia de Atlético, el Bicho tuvo más control del balón, pero esa posesión no se tradujo en goles. No supieron concretar sus oportunidades y se quedaron con el grito de gol atragantado.

El resultado repartido de puntos puede ser considerado positivo, siempre que ambos equipos utilicen esta experiencia para aprender de los errores que les impidieron marcar en un encuentro donde dispusieron de múltiples ocasiones para hacerlo.
