El mundo del fútbol está conmocionado por la trágica muerte de Juan Izquierdo, el defensor central de Nacional, quien falleció a los 27 años. Izquierdo había estado internado durante cinco días en el Hospital Albert Einstein en Brasil, tras sufrir un colapso cardíaco y desmayarse en pleno partido contra San Pablo, en los octavos de final de la Copa Libertadores.
El Club Nacional de Football, en un comunicado doloroso publicado en sus redes sociales, anunció el fallecimiento de Izquierdo: “Con el más profundo dolor e impacto en nuestros corazones, el Club Nacional de Football comunica el fallecimiento de nuestro querido jugador Juan Izquierdo. Expresamos nuestras más sinceras condolencias a su familia, amigos, colegas y allegados. Todo Nacional está de luto por su pérdida irreparable. QEPD, Juan, estarás para siempre con nosotros”.
Durante el tiempo que estuvo en el hospital, la familia del jugador y la dirigencia del club estuvieron presentes en el centro médico, esperando el desenlace. También pasaron por allí Rafinha y Jonathan Calleri del San Pablo, quienes mostraron su apoyo y solidaridad, con Calleri ofreciendo incluso su tarjeta de crédito para cubrir los gastos de la internación. Alejandro Balbi, presidente de Nacional, reveló que Calleri “me llama hasta cuatro veces por día” para estar al tanto de la situación.
El Club Atlético Peñarol, rival de Nacional, también expresó su pesar por la muerte de Izquierdo: “El Club Atlético Peñarol lamenta profundamente el fallecimiento de Juan Manuel Izquierdo, exjugador de nuestra institución. Expresamos nuestras más sentidas condolencias y abrazamos a sus familiares, a sus amigos y al Club Nacional de Football en este momento de tanto dolor”.
El 26 de agosto, se había publicado un parte médico alarmante sobre el estado de salud de Izquierdo. El reporte indicaba que el jugador seguía en la Unidad de Terapia Intensiva desde el 22 de agosto, dependiente de ventilación mecánica, con un cuadro neurológico crítico. Horas antes de este comunicado, se había informado sobre una “progresión cerebral y un aumento de la presión intracraneal”.
El incidente ocurrió en el Estadio Morumbí, cuando Izquierdo ingresó al campo en el segundo tiempo en lugar de Sebastián Coates. Pocos minutos antes del final del partido, el jugador se desplomó, colapsando en el terreno de juego. El personal médico del estadio le proporcionó atención de emergencia antes de ser trasladado en ambulancia, mientras el público lo despedía con aplausos.
Los informes médicos revelaron que Izquierdo llegó al hospital en “paro cardíaco, de inicio indeterminado, secundario a una arritmia”. El hospital inició de inmediato maniobras de resucitación cardiopulmonar y desfibrilación, logrando restaurar la circulación espontánea. Desde entonces, estuvo en la Unidad de Terapia Intensiva, sedado y con ventilación mecánica, bajo estrictos cuidados neurológicos, según el parte firmado por el neurólogo Marcos Vinicius Tadao Fujino, el cardiólogo Carlos Vicente Serrano Junior, y el director médico, Miguel Cendoroglo Neto.
La cónsul de Uruguay en San Pablo, Marta Echarte, había descrito la situación como “prácticamente irreversible” tras una visita al hospital con el presidente de Nacional y la familia de Izquierdo. Selena, esposa del futbolista, había solicitado en redes sociales cadenas de oración para su esposo: “Juanma nos necesita, sé que él es muy querido y todos estamos deseando que pase este momento. En casa lo espera su hijita de dos años y su hijito de 8 días. Él tiene mucho por vivir. Por favor recen por él”.
Luis Suárez, excompañero de Izquierdo en Nacional, dedicó la victoria del Inter Miami el 24 de agosto a su compatriota. Mostró una camiseta con el mensaje “Fuerza Juan” después de marcar dos goles y expresó en redes sociales: “Fuerza Juan! Estamos todos con vos y tu familia”.
Izquierdo, quien ganó un título con Nacional, había compartido en una entrevista cómo valoraba su tiempo con Suárez: “Fue algo hermoso. Aunque no participé mucho, siempre me hicieron sentir parte. Esa familia va a quedar en mi corazón para siempre”.
Durante su carrera, Izquierdo jugó 139 partidos, anotó siete goles, dio cinco asistencias, recibió 36 tarjetas amarillas y fue expulsado en siete ocasiones. Estaba en su segundo ciclo con Nacional, tras un paso previo por el Liverpool de Uruguay. En 2024, acumulaba 1801 minutos en 23 partidos y había anotado un gol en la victoria 4-2 sobre Racing de Uruguay el 3 de mayo en el Gran Parque Central.
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