El colombiano Roger Martínez se convirtió en el héroe que selló la victoria de Racing en la final de la Copa Sudamericana, anotando el tercer gol que aseguró el triunfo 3-1 frente a Cruzeiro. Su tanto llegó en los últimos instantes del partido disputado en el estadio La Olla de Asunción, poniendo fin al suspenso y confirmando una nueva estrella para la Academia. Durante los festejos, el delantero expresó su gratitud al club: «Este club me abrió las puertas como si fuera mi familia».
El gol decisivo de Martínez, que sentenció el encuentro, se produjo cuando el reloj marcaba 49 minutos y 55 segundos, casi al final de los cinco minutos de tiempo añadido por el árbitro uruguayo Esteban Ostojich. Con Cruzeiro volcado al ataque en busca del empate, Racing aprovechó un despeje que le permitió al delantero colombiano tomar el balón en el centro del campo. Desde allí, emprendió una veloz carrera hacia el área rival y, al llegar, ejecutó un preciso derechazo cruzado que infló la red y desató la euforia en todo el estadio.
La celebración fue inmediata y explosiva. En el césped, los jugadores de Racing se abrazaron con júbilo, mientras el banco de suplentes se unía al festejo. En las tribunas, los hinchas explotaron de emoción, y en el Cilindro de Avellaneda, miles de fanáticos que seguían el partido estallaron en gritos y cánticos. Ese gol fue el broche de oro de un partido histórico que no dejó lugar para más jugadas, salvo el protocolo de reanudar el juego antes del silbatazo final que consagró a Racing campeón.
El ingreso de Roger Martínez desde el banco de suplentes resultó ser una decisión acertada del técnico Gustavo Costas. A los 29 minutos del segundo tiempo, Martínez entró al campo en lugar de Adrián «Maravilla» Martínez, quien había marcado el segundo gol de Racing en el primer tiempo. El primer tanto había sido obra de Gastón Martirena a los 15 minutos, mientras que Kaio Jorge puso algo de suspenso al descontar para Cruzeiro a los siete minutos del complemento.
En medio de los festejos por la consagración, Roger Martínez expresó su alegría y agradecimiento hacia Racing: «Estoy muy feliz por este momento y por poder hacer historia en este lindo club». Además, destacó el significado personal de este logro: «Esta institución me dio la posibilidad de ser futbolista profesional, me abrió las puertas como si fuera mi familia, y qué mayor felicidad que haber podido darle este título con un gol».
Con su actuación decisiva, Roger Martínez no solo aseguró el triunfo, sino que también dejó una marca imborrable en la historia de Racing, que vuelve a celebrar un título internacional después de años de espera.