Tras una jornada caracterizada por altas temperaturas y un sol radiante, Tucumán fue sorprendida nuevamente por intensas lluvias, que se manifestaron en forma de una fuerte tormenta afectando a la Capital y sus alrededores durante la noche del miércoles. En este contexto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió un alerta amarillo para la provincia, señalando que dicha advertencia se mantendrá activa hasta la tarde del jueves.
El pronóstico para el jueves anticipa un panorama climático inestable, con lluvias y chaparrones intermitentes que podrían extenderse durante los próximos días, alcanzando incluso la semana entrante. Las temperaturas máximas se estiman en torno a los 26 grados, mientras que los niveles de humedad seguirán siendo elevados, lo que contribuirá a la sensación de bochorno.
En relación a este fenómeno, el meteorólogo Cristofer Brito, a inicios de esta semana, ya había señalado: «Una ola de aire cálido y húmedo está impactando en todo el norte argentino, generando la formación de chaparrones y tormentas, algunas de ellas con características de fuerte intensidad». Según sus declaraciones, este tipo de condiciones climáticas no será algo pasajero.
«Este clima permanecerá en el norte del país y, por ende, en Tucumán, durante los próximos siete u ocho días, posiblemente hasta el martes 3 de diciembre. Durante este período, se registrarán chaparrones y tormentas de manera aislada, especialmente en horas de la tarde y la noche», explicó Brito, subrayando la persistencia de este escenario meteorológico en la región.
