Renunció Diego Martínez: «Presenté la renuncia, no vamos a continuar»

Tras el primer gol de Belgrano, la frustración de Juan Román Riquelme se hizo evidente. Molesto y sin poder ocultar su enojo, el vicepresidente de Boca Juniors decidió abandonar el palco, donde había estado siguiendo el partido, y se dirigió directamente hacia los vestuarios. Su paciencia había llegado al límite, y su partida fue un claro indicio de que la situación ya no podía sostenerse. Poco después, se unió a él el Consejo de Fútbol. Juntos, aguardaron el desenlace del encuentro, que terminó con una derrota por 2-0 para el Xeneize. Al finalizar el partido, Riquelme y el Consejo se reunieron con Diego Martínez, el entrenador del equipo, en lo que sería una conversación crucial. Al término de esa reunión, Martínez presentó su renuncia.

Frente a la prensa, en la sala de conferencias del estadio Gigante de Alberdi, Martínez hizo el anuncio de manera formal. «Buenas noches, no va a haber el ida y vuelta que solemos tener sobre fútbol», comenzó diciendo, claramente afectado. «Simplemente quiero informar que he presentado mi renuncia. Hablé con el Consejo de Fútbol, con el presidente, y luego con los jugadores. Hemos decidido que no continuaremos en el cargo como cuerpo técnico». El técnico se mostró agradecido hacia el club y el presidente por la confianza que depositaron en él, pero dejó en claro que, a pesar de que se sentía responsable junto con el resto del equipo, lo más saludable para la institución era dar un paso al costado. «De esta manera, los muchachos podrán salir adelante», agregó.

Martínez también aprovechó para expresar su gratitud hacia todos los miembros del club que confiaron en él y su equipo, haciendo énfasis en los jugadores. A lo largo de su tiempo en Boca, según sus palabras, el objetivo principal siempre fue que el equipo jugara bien y ganara cada fin de semana. «En algunos momentos lo logramos, en otros no», reconoció. Por eso, consideró que la mejor decisión era retirarse. Finalmente, se dirigió a la hinchada, agradeciendo el apoyo que recibieron durante los nueve meses que estuvieron al frente del equipo, a pesar de no tener «un nombre pesado en la historia de Boca». Con humildad, cerró pidiendo disculpas a los fanáticos por no haber podido devolverles todo el apoyo brindado durante su gestión.