La reciente eliminación de San Martín ante Deportivo Morón, tras un empate 0 a 0 en el estadio “Nuevo Francisco Urbano”, no solo significó un nuevo intento fallido de ascenso, sino que también provocó un fuerte impacto en la estructura institucional del club. Tras el golpe deportivo, la comisión directiva encabezada por Rubén Moisello resolvió dar un paso al costado, marcando así el inicio de un proceso de transición dentro de la entidad.
Según confirmaron fuentes internas desde La Ciudadela, la renuncia se realizará de acuerdo con lo estipulado por el estatuto. Una vez formalizadas las dimisiones, será la Junta Fiscalizadora la encargada de asumir la conducción de manera temporal, con la responsabilidad de convocar a elecciones en un plazo cercano. El objetivo, según allegados a la dirigencia, es que el nuevo equipo directivo cuente con tiempo suficiente para planificar el futuro deportivo del club, definiendo tanto la composición del plantel como la continuidad de Mariano Campodónico, cuya permanencia dependerá de las decisiones de las nuevas autoridades.
Un miembro de la comisión saliente señaló que el club “está saneado” y preparado para iniciar una nueva etapa. “La idea es liberar tensiones y atender el reclamo de los hinchas, que durante todo el año mostraron su descontento con la conducción y dejaron de acompañar en La Ciudadela”, indicó, subrayando que la medida busca descomprimir un clima que se había vuelto insostenible. En este marco, el oficialismo no presentará ninguna lista para las próximas elecciones.
Poco después de la llegada del plantel a Tucumán, Moisello habló con LG Play y reconoció el golpe emocional que significó la eliminación. “Ahora vamos a hacer una reunión urgente con la comisión directiva y vamos a determinar los pasos a seguir. Estamos bastante golpeados, doloridos. Necesitamos dejar que pase un poco la bronca y, con la cabeza más fría, definir lo que viene”, expresó en el aeropuerto Benjamín Matienzo. El dirigente admitió que “lo deportivo fue el punto flojo de la gestión” y agregó que “no pudimos lograr el ascenso en estos cuatro periodos. Los resultados están a la vista”.
Sobre la posibilidad de un llamado a elecciones, Moisello no lo descartó y finalmente se confirmó la decisión de dejar paso a nuevas autoridades. “Siempre está presente. Queda un poco menos de la mitad del mandato, pero hay un cierto cansancio y eso se refleja en algunas actitudes que uno puede tomar”, comentó, asegurando que no continuará: “No, no estoy con fuerzas para volver a presentarme. Lo máximo que puedo hacer es terminar el mandato”.
Pese al cambio de conducción, una certeza es que la relación con el principal sponsor del club, la Caja Popular de Ahorros, continuará, garantizando la continuidad de los recursos que aportan al club. El proceso de sucesión, destacaron desde La Ciudadela, se llevará adelante de manera ordenada y conforme al estatuto, con la Junta Fiscalizadora a cargo de la gestión provisional hasta la realización de las elecciones.