La Selección Argentina cerró su participación en las Eliminatorias Sudamericanas con una derrota por la mínima diferencia frente a Ecuador. El partido, correspondiente a la 18ª jornada del certamen, se disputó en el estadio Monumental Banco Pichincha de Guayaquil. Con ambos equipos ya clasificados al Mundial 2026 y con el conjunto dirigido por Lionel Scaloni habiendo asegurado el primer puesto con anticipación, el encuentro se presentaba como un trámite, aunque terminó siendo mucho más intenso y accidentado de lo previsto. El encargado de impartir justicia fue el árbitro colombiano Wilmar Roldán, quien tuvo un papel protagónico debido a la fuerte fricción que se vivió en los 90 minutos.
Desde el inicio, el partido estuvo marcado por un exceso de juego brusco. Pese a que nada trascendental estaba en juego, tanto argentinos como ecuatorianos disputaron cada pelota con demasiada vehemencia, lo que obligó al juez a intervenir en varias ocasiones para intentar controlar el desarrollo. La Scaloneta, lejos de mostrar la fluidez de su habitual estilo, se encontró incómoda en el terreno de juego, mientras que el combinado local fue quien logró adaptarse mejor al ritmo cortado y físico que se planteó en Guayaquil.
En ese contexto, Ecuador generó las primeras ocasiones claras, poniendo a prueba en dos oportunidades a Emiliano “Dibu” Martínez, quien respondió con solvencia y mantuvo a flote al equipo albiceleste en los momentos iniciales. Sin embargo, Argentina nunca consiguió imponer su dominio ni desplegar su conocido poderío ofensivo, lo que hizo que el trámite resultara cuesta arriba desde el comienzo.
El quiebre del encuentro llegó alrededor de los 31 minutos de la primera mitad. Tras un pelotazo largo que desacomodó a la defensa argentina, Leandro Balerdi perdió la referencia en la marca, lo que dejó a Enner Valencia con posibilidades de quedar mano a mano. Ante esa situación, Nicolás Otamendi recurrió a una infracción para frenar al delantero ecuatoriano, acción que le valió la tarjeta roja directa y dejó al equipo de Scaloni con un hombre menos. Desde ese momento, el partido se inclinó a favor de los locales.
La presión de Ecuador se hizo más notoria y, cuando parecía que el marcador se iría en blanco al entretiempo, llegó la jugada más controvertida de la noche. El árbitro Roldán sancionó un penal tras una supuesta falta de Nicolás Tagliafico sobre Ángelo Preciado, decisión que fue muy discutida por los futbolistas argentinos. Finalmente, Enner Valencia se hizo cargo de la ejecución y, con precisión, venció a Dibu Martínez para establecer el 1-0 a los 45 minutos.
Ese tanto terminó marcando la diferencia definitiva en un encuentro que, en los papeles, parecía de mero trámite, pero que en la práctica se transformó en un desafío complicado para la Scaloneta, que no pudo cerrar su campaña en las Eliminatorias con una sonrisa.
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