Durante los primeros 19 meses de gestión del Gobierno de Javier Milei, se registró un marcado descenso tanto en la cantidad de empleadores como en los trabajadores cubiertos por el sistema de riesgos del trabajo, según la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT). Esta caída se produce en un contexto en el que la recuperación económica del segundo semestre de 2024, posterior a la recesión provocada por el ajuste monetario en los primeros seis meses del año, aún no logra consolidarse.
De acuerdo con los registros de la SRT, en noviembre de 2023, justo antes de la asunción del nuevo gobierno, existían 511.337 empleadores y 9.840.290 trabajadores asegurados. Para junio de 2025, estas cifras se redujeron a 496.035 unidades productivas y 9.621.034 empleados, evidenciando un retroceso sostenido que refleja la contracción de la actividad económica durante la administración actual.
El balance neto indica la desaparición de 15.302 empleadores —denominados “unidades productivas” por la SRT, concepto que abarca empresas, entidades y organismos públicos o privados que ocupan a una o más personas y generan bienes o servicios—, mientras que la cantidad de trabajadores registrados bajo cobertura de riesgos del trabajo se redujo en 219.256 puestos durante el mismo período.
Al desglosar los datos por tamaño de empresa, se observa que las pérdidas de empleo se concentraron en compañías de mayor porte. Según un informe del CEPA, el 72% de la reducción de puestos se produjo en empresas con más de 500 trabajadores, mientras que aquellas con menos de 500 empleados explican el 28% restante. En términos porcentuales, las grandes empresas disminuyeron su plantilla en un 3,54%, frente a una caída del 1,32% en las empresas más pequeñas.
Por sectores, el más impactado fue la Administración pública, defensa y seguridad social obligatoria, con una pérdida de 89.794 trabajadores entre noviembre de 2023 y junio de 2025. Le siguió la Construcción, que redujo su fuerza laboral en 81.463 puestos, mientras que los Servicios de transporte y almacenamiento perdieron 53.101 empleos y la Industria manufacturera descendió en 43.063 posiciones. En términos relativos, Construcción registró la mayor caída, con un 17,1% de reducción en su personal registrado.
En cuanto a la parte empleadora, Transporte y Almacenamiento fue el sector más afectado, con 4.159 empleadores menos. Otros sectores con disminuciones significativas fueron Servicios inmobiliarios, Comercio al por mayor y menor, reparación de vehículos automotores y motocicletas, Servicios profesionales, científicos y técnicos y Construcción.
Este panorama negativo se enmarca en un contexto económico más amplio caracterizado por un estancamiento de la actividad desde fines de 2024. Las altas tasas de interés reales, la incertidumbre política previa a las elecciones de octubre y la volatilidad cambiaria limitan la recuperación. Según el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del Indec, la actividad cayó 0,7% en junio respecto de mayo, mientras que la industria y la construcción registraron retrocesos mensuales de 2,3% y 1,8%, respectivamente.
Indicadores adelantados confirman esta tendencia: en julio, la molienda de soja cayó 6,4% y la recaudación de IVA 1,4%. En agosto, los patentamientos de autos descendieron 2,8%, la producción automotriz 6,1% y los despachos de cemento 5,6%. Según Adimra, la metalurgia, sector estratégico como proveedor de otras industrias, sufrió en agosto una variación interanual negativa del 6,1% y una caída de 2,3% respecto al mes previo.
En síntesis, los datos reflejan un fuerte retroceso económico durante los primeros 19 meses del gobierno de Milei, con pérdidas importantes tanto en empleadores como en trabajadores, concentradas principalmente en las empresas de mayor tamaño y en sectores clave de la economía.