El Tesoro argentino logró captar este miércoles US$1000 millones en lo que constituye la primera emisión de deuda en moneda extranjera durante la gestión de Javier Milei. Para esta operación, el Gobierno fijó una tasa del 9,26%, superior al cupón del 6,5% que ofrece el bono, y recibió ofertas por un total de US$1420 millones, evidenciando un interés considerable del mercado.
El ministro de Economía, Luis Caputo, había anticipado el martes que la meta era recaudar US$1000 millones a una tasa menor al 9%, aunque los analistas del mercado no eran tan optimistas respecto al costo final de la colocación. El bono colocado, con vencimiento en 2029, tiene un cupón anual de 6,5%, pero fue licitado “por debajo de la par”, es decir que por cada lámina de US$100, el Tesoro recibió US$91. Este descuento incrementa el rendimiento efectivo de los bonos al momento de la emisión, alcanzando la tasa anual de 9,26%, según informó el Ministerio de Economía en X. Además, precisaron que este rendimiento se encuentra 550 puntos básicos por encima de los bonos del Tesoro estadounidense de igual duración y unos 100 puntos básicos por debajo de los títulos existentes de similar plazo, reflejando confianza de los inversores en los fundamentos económicos del país.
Lo recaudado se destinará parcialmente al pago de capital de los Bonar 2029 y 2030, cuyos vencimientos suman más de US$4200 millones el próximo 9 de enero.
Para asegurar una demanda local suficiente, el Gobierno implementó tres medidas previas a la licitación:
- La Superintendencia de Seguros de la Nación autorizó a las compañías de seguros a usar cauciones en dólares para adquirir el bono, limitando su participación a un máximo del 20% de su cartera de títulos públicos.
- El Banco Central habilitó a personas humanas que hayan comprado dólares en bancos a participar en la licitación primaria y a reinvertir lo recibido en amortizaciones o renta, con la condición de mantener los bonos en dólares por 15 días antes de poder convertirlos a pesos.
- Se flexibilizaron las normas sobre la posición en dólares de los bancos: si estos adquieren el bono 2029 y desean venderlo en pesos, deberán esperar 90 días para recomprar dólares en el mercado oficial, frente a los 300 días que regían anteriormente.
Además, la Secretaría de Finanzas confirmó que este jueves se llevará a cabo otra licitación, esta vez de deuda en pesos, incluyendo letras capitalizables con vencimientos entre abril y noviembre de 2026, un bono capitalizable a mayo de 2027, letras con tasa variable, títulos ajustados por inflación con vencimiento en 2026, 2027 y 2028, y una letra vinculada al tipo de cambio oficial con plazo hasta abril del próximo año.
En conjunto, estas operaciones representan un esfuerzo del Gobierno para gestionar la deuda y fortalecer la presencia del país en los mercados financieros internacionales, asegurando liquidez para cumplir compromisos de corto plazo y reforzar la confianza de los inversores en la gestión económica.
