En noviembre, el consumo experimentó un leve alivio al registrar un aumento del 1,5% en las ventas de supermercados y autoservicios en comparación con el mes anterior, de acuerdo con datos de la consultora Scentia. Este incremento podría interpretarse como un indicio de cambio en la dinámica del sector, aunque persisten desafíos significativos dentro de un panorama económico todavía complejo.
El aumento mensual reviste especial importancia por diversos motivos. Por un lado, rompe con la trayectoria descendente que venía observándose desde abril, cuando los niveles de consumo alcanzaron su punto más bajo. Si bien en los meses posteriores se evidenció una desaceleración en las caídas interanuales, no se habían registrado incrementos en términos comparativos con el mes previo. Este repunte representa, por tanto, un primer signo alentador tras meses de cifras negativas.
Otro aspecto destacable del dato de noviembre es que este mes cuenta con un día menos que octubre. Por ello, el crecimiento del 1,5% en términos desestacionalizados cobra mayor relevancia, ya que indica que, a pesar de las restricciones económicas, las familias ajustaron sus hábitos de consumo. En este contexto, se observó una tendencia a priorizar la compra de bienes esenciales, posiblemente impulsada por una leve recuperación en el poder adquisitivo de los hogares, según consignó el medio Ámbito.
Una de las razones principales detrás de este repunte parece estar vinculada con la desaceleración en el incremento de precios. Según el informe, los precios en los autoservicios alcanzaron su punto máximo en marzo, con un aumento interanual del 345,5%. Desde entonces, esta tendencia se moderó, cerrando noviembre con un crecimiento del 312,5%. Esta desaceleración permitió que los consumidores pudieran adquirir una mayor cantidad de productos con el mismo ingreso nominal, ofreciendo cierto alivio en un entorno de inflación elevada.
Además, el contexto temporal también jugó un rol importante, ya que el inicio de la temporada de fin de año suele traer consigo un incremento en la actividad comercial, impulsado por las festividades de noviembre y diciembre. Sin embargo, este repunte presenta una diferencia notable respecto a años anteriores, específicamente en comparación con 2023: esta mejora no estuvo asociada a medidas de estímulo gubernamental, como los programas electorales denominados “platita”. La ausencia de políticas de este tipo podría otorgar mayor estabilidad y credibilidad a este crecimiento, sugiriendo que se trata de una recuperación más genuina y menos dependiente de incentivos externos.
En síntesis, aunque persisten las complejidades económicas, el crecimiento en las ventas registrado durante noviembre podría marcar un punto de inflexión en el comportamiento del consumo. La combinación de una desaceleración inflacionaria y un contexto de ajuste en los patrones de compra de las familias genera expectativas moderadas, pero positivas, para la dinámica del sector en los próximos meses.
Dos mujeres fueron aprehendidas, acusadas de vender sustancias prohibidas: secuestraron 87 bagullos de marihuana, balanza…
En la madrugada de este jueves, los efectivos de la División Patrulla Motorizada y de…
El personal de parada de la División Cabinas de Vigilancia aprehendió a un joven por…
Tras un operativo policial que incluyó varios allanamientos, se logró el secuestro de diversos elementos…
En recorridos preventivos que realizaban en la noche del miércoles, los efectivos de la División…
Una medida de allanamiento en un domicilio de la localidad de Alto Verde, Chicligasta, terminó…