Durante la jornada del jueves, el mercado cambiario en Argentina experimentó un nuevo incremento en todas las cotizaciones del dólar, marcando una continuidad en la tendencia ascendente que viene mostrando en los últimos días. El aumento más notorio se registró en la cotización minorista, donde el precio del dólar alcanzó los $1.190 en las pizarras del Banco Nación, lo que representa un incremento de $2 con respecto al valor anterior.
En el ámbito mayorista, la divisa estadounidense también mostró un alza significativa. En ese segmento, el tipo de cambio subió $19,87 y cerró en $1.182,50, reflejando así un movimiento más abrupto en comparación con el canal minorista.
Por otro lado, los tipos de cambio financieros no quedaron al margen de esta tendencia. El dólar MEP —un mecanismo que permite adquirir divisas de forma legal sin necesidad de recurrir al mercado oficial ni al dólar blue— se ofreció en el mercado a $1.193,36, con una suba diaria de $25,36. Este tipo de dólar es muy utilizado por los argentinos que buscan resguardar sus ahorros en moneda extranjera sin incumplir las regulaciones cambiarias vigentes.
En tanto, el dólar contado con liquidación (CCL), herramienta financiera utilizada principalmente para transferir dólares al exterior, también se incrementó en la jornada. Cerró en $1.208,58, con un aumento de $26 respecto al día anterior. No obstante, a pesar de la suba, aún se ubica notablemente por debajo de los niveles que había alcanzado el viernes 11 de abril, cuando se puso en marcha el nuevo esquema cambiario del Gobierno. En aquel momento, el CCL cotizaba $131,90 por encima de su valor actual.
En este contexto de subas generalizadas en las distintas variantes del dólar, el presidente Javier Milei hizo declaraciones para tratar de llevar calma al mercado. En una entrevista radial, señaló que el tipo de cambio debería moverse en dirección a la parte baja de la banda de flotación, la cual actualmente se sitúa por debajo de los $1.000, en lugar de acercarse al límite superior, que se ubica en torno a los $1.400. El mandatario explicó que, según sus cálculos, una vez que se concrete el ingreso de divisas previsto por el Gobierno, el valor de cobertura de toda la base monetaria amplia sería de $900 por dólar.
Para ilustrar su razonamiento, Milei utilizó una metáfora: “Es como si por un billete de 10 dólares alguien pretendiera recibir U$S20”. De esta manera, el jefe de Estado insistió en que no hay motivos para una suba desmedida del dólar y que, si bien pueden darse movimientos puntuales que alteren momentáneamente su valor, la lógica del sistema de libre flotación implica que el precio puede tanto aumentar como disminuir, dependiendo de múltiples factores. “Esto también forma parte de un proceso de aprendizaje, por eso lo llamamos ‘aprender a flotar’. Si recuerdan, yo tuve una charla con Alejandro Fantino y el título de mis apuntes era justamente ese: aprendiendo a flotar”, concluyó el mandatario.
Estas declaraciones buscan establecer un marco de previsibilidad en un escenario volátil, donde las expectativas del mercado y las decisiones de política económica se entrelazan constantemente, afectando tanto a las cotizaciones como a la percepción pública de la estabilidad financiera.
