El FMI redujo los sobrecargos impuestos a los países deudores, lo que favorece a Argentina

El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) tomó la decisión de reducir los sobrecargos, que son intereses excesivos aplicados a los países deudores que han solicitado créditos del organismo más allá de sus capacidades financieras. Este anuncio, realizado el viernes, resulta beneficioso para Argentina, ya que se traduce en un ahorro de aproximadamente 450 millones de dólares en el pago de estos recargos durante el año 2024.

Esta medida fue impulsada por un pedido formal realizado por el economista Joseph Stiglitz y el exministro de Economía argentino, Martín Guzmán, quienes solicitaron la intervención de Kristalina Georgieva, así como de los otros 24 miembros del directorio del FMI. En el comunicado emitido tras la reunión del viernes, el FMI expresó que «en un entorno global desafiante y en un momento de altas tasas de interés, nuestros miembros han llegado a un consenso sobre un paquete integral que reduce sustancialmente el costo del endeudamiento, mientras se protege la capacidad financiera del FMI para apoyar a los países necesitados».

El comunicado también destacó que las nuevas medidas aprobadas disminuirán los costos de endeudamiento para los miembros en un 36%, lo que equivale a cerca de 1.200 millones de dólares al año. Se prevé que el número de países que se enfrentarán a estos recargos se reduzca de 20 a 13 en el año fiscal 2026.

Además, el organismo aclaró que el «paquete aprobado entrará en vigor el 1 de noviembre de 2024». Esta reducción se logrará al modificar la tasa de interés del Derecho Especial de Giro (DEG), elevar el umbral para los recargos basados en niveles, disminuir la tasa de recargos por tiempo y aumentar los umbrales para las tarifas de compromiso.

El FMI también destacó que «los cargos y recargos cubren los gastos de intermediación crediticia, ayudan a acumular reservas para protegerse contra riesgos financieros y proporcionan incentivos para un endeudamiento prudente». Esto permite al FMI ofrecer apoyo vital a la balanza de pagos en términos asequibles a los países miembros cuando más lo requieren.

Un factor que tuvo peso en la decisión fue el sólido respaldo de los Estados Unidos y el G7, motivado por el deseo de reducir la deuda y aliviar la situación de Ucrania en medio de su conflicto con Rusia. El presidente estadounidense, Joe Biden, se comprometió con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, a hacer todo lo posible para impedir que Vladimir Putin obtenga una victoria en esta guerra asimétrica.

La solicitud que inició Martín Guzmán se remonta al préstamo de 45.000 millones de dólares otorgado a Mauricio Macri, que llevó a Argentina a exceder su cuota, junto a otras 21 naciones, incluidas Ucrania, Egipto, Costa Rica, Ecuador, Pakistán, Jordania y Kenia. La propuesta que Guzmán presentó en 2020 era clave, ya que «Argentina es el país que más paga», tal como afirmó el exministro de Hacienda.

Se estima que en los últimos tres años, Argentina ha pagado alrededor de 3.700 millones de dólares en sobrecargos. Con la nueva medida anunciada, se espera que el Gobierno ahorre aproximadamente 400 millones de dólares anuales en el futuro.