Ricardo Quintana, productor limonero y miembro de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino, ha alertado sobre el riesgo inminente que enfrenta Tucumán de perder 12.000 hectáreas de cultivos de limón. Esta preocupación se suma a las 6.000 hectáreas que ya se han perdido y que son irreparables.
«La Estación Experimental relevó 12.000 hectáreas que están completamente abandonadas» comentó ante la prensa Quintana.
El inicio de la zafra citrícola 2024 en Tafí Viejo marcó el comienzo de una temporada complicada para los productores e industriales, quienes enfrentan precios bajos debido a la sobreproducción mundial de limón. Otros países han incursionado en este mercado y se han convertido en competidores serios para la provincia en términos de exportación.
Según Quintana, la crisis en el sector industrial es consecuencia de la sobreproducción mundial que ha persistido en los últimos cuatro años. Esto ha resultado en una disminución de los precios de los jugos y aceites derivados del limón, y la situación parece no tener solución a la vista.
El mayor desafío al que se enfrenta Tucumán es la posibilidad de perder su liderazgo en la exportación de limones. Sin embargo, la falta de acuerdo entre los diversos actores del sector dificulta la búsqueda de soluciones efectivas.
Quintana menciona que ya se han perdido más de 6.000 hectáreas de cultivos de limón, que han sido reemplazadas por otros cultivos o actividades. Además, la Estación Experimental ha identificado 12.000 hectáreas abandonadas, con plantas de limón descuidadas y fuera del mercado.
Tucumán representa el 80% de la producción nacional de limón, mientras que el resto corresponde a las provincias de Salta y Jujuy. Los productores reconocen que el problema debe abordarse localmente, aunque consideran que la intervención del gobierno, tanto a nivel provincial como nacional, es necesaria en este momento.
Miguel Paz Posse, secretario de la Cooperativa de Productores Citrícolas de Tafi Viejo, describió la próxima zafra como una época de grandes dificultades para los productores citrícolas, quienes han estado enfrentando una crisis financiera considerable en los últimos tres años debido a la falta de rentabilidad en el campo.
En respuesta a esta situación, el gobernador Osvaldo Jaldo expresó la importancia de que todos los actores involucrados en la industria citrícola, incluyendo cooperativas, empresas privadas, multinacionales y productores de pequeña y mediana escala, trabajen juntos para garantizar una temporada 2024 aceptable.
Jaldo afirmó que el Gobierno está comprometido a apoyar a las economías regionales, incluida la citrícola, y se mostró dispuesto a colaborar estrechamente para enfrentar los desafíos que se presentan en la próxima zafra. Destacó la necesidad de una colaboración integral entre el sector productivo, industrial, comercial y los gobiernos provinciales y nacionales para lograr resultados positivos al final de la temporada.
