El Gobierno nacional contempla la posibilidad de otorgar un bono de $55.000 en el mes de enero a jubilados y pensionados como medida para contrarrestar la disminución de ingresos provocada por la fuerte inflación. Este pago único sería impulsado por el Ministerio de Capital Humano y podría formalizarse mediante un decreto en las próximas horas.
El bono se dirigiría a distintos grupos, según un proyecto que podría ser anunciado durante la semana:
- Titulares de prestaciones contributivas previsionales a cargo de la ANSES, concedidas en virtud de la Ley N° 24.241, regímenes nacionales generales anteriores y sus modificatorias, regímenes especiales derogados, o por las ex Cajas o Institutos Provinciales y Municipales de Previsión cuyos regímenes fueron transferidos a la Nación, y prestaciones del régimen establecido por el Decreto Nº 160/05.
- Beneficiarios de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM).
- Beneficiarios de pensiones no contributivas por vejez, invalidez, madres de siete hijos o más, y demás pensiones no contributivas y pensiones graciables cuyo pago esté a cargo de la ANSES.
Aunque aún faltan detalles por confirmar, se estima que los beneficiarios con ingresos iguales o inferiores a $105.712,61 recibirían un bono de $55.000. Aquellos que perciban montos superiores a esa cifra recibirían la diferencia necesaria para alcanzar los $160.712,61.
En relación con la recomposición de haberes jubilatorios, el vocero presidencial Manuel Adorni anunció previamente cambios en la fórmula de pago y la eliminación de la movilidad jubilatoria. Explicó que la modificación se llevaría a cabo mediante un decreto para recomponer los haberes jubilatorios, destacando que la fórmula anterior habría implicado una pérdida de poder adquisitivo en torno al 40% en el primer trimestre.