En julio, la actividad económica general experimentó una disminución del 1,3% en comparación con el mismo mes del año anterior; sin embargo, se observó un incremento del 1,7% respecto a junio, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En el balance acumulado del año, el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) muestra una caída del 3,1%.
El proyecto de Ley de Presupuesto, que el Poder Ejecutivo presentó al Congreso a mediados de septiembre, prevé que la economía sufrirá una contracción del 3,8% en el presente año, aunque se anticipa una recuperación del 5% para el año próximo.
A pesar de las proyecciones económicas, el Indec destacó que en julio, el sector agropecuario experimentó un notable aumento del 23,6%, cifra que se atribuye a la baja base de comparación provocada por la sequía del año anterior. Asimismo, la explotación de minas y canteras creció un 5,7%, impulsada por la extracción de litio, gas y petróleo, mientras que la distribución de servicios como gas, energía eléctrica y agua también aumentó en un 3,6%.
Por otro lado, se registraron descensos significativos en varios sectores. La industria mostró una reducción del 5,6%, la construcción sufrió una caída del 14,8%, y tanto el consumo mayorista como el minorista disminuyeron en un 5,3%. Además, el área de hoteles y gastronomía también se vio afectada, con un descenso del 4,5%.
El ministro de Economía, Luis Caputo, manifestó la semana pasada que, a pesar de la volatilidad que puede observarse, “no habrá crisis. Ese riesgo está eliminado”. Durante su intervención en el 140° Aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario, Caputo subrayó que «cuando explicás, la gente entiende, y cuando entiende, la gente apoya».
Asimismo, afirmó que hay momentos en que la situación es comprensible y otros en que no, pero se comprometió a seguir esforzándose para clarificar la situación económica: “Nuestro programa tiene una lógica detrás”.