El miércoles 11 de diciembre, Gran Hermano (Telefe) vivió su segunda gala de nominación, donde los participantes tuvieron la oportunidad de formar una nueva placa de nominados. Durante esta gala, dos concursantes no pudieron participar en la votación dentro del confesionario, pero el resto de los jugadores acudió a este espacio para elegir a los nuevos nominados, quienes quedaron al borde de la eliminación: Ulises Apóstolo, Santiago Algorta y Luciana Martínez.
En el marco de los beneficios que otorgó la prueba del líder semanal, Sofía «Sopa» Buscio, quien se consagró ganadora, aprovechó su poder para fulminar a Renato Rossini y Martina Pereyra. Ambos fueron incluidos en la lista de nominados, aumentando las tensiones en la casa.
Además de esta medida, esa noche Sofía utilizó otro beneficio que le correspondía, el cual le permitía cambiar la composición de la placa. De esta forma, decidió subir a un participante y bajar a otro. Sofía dejó a Keila Sosa en manos del público, permitiendo que fuera ella quien enfrentara el posible voto de la audiencia, mientras que, por otro lado, salvó a Luz Tito, evitando que la participante tuviera que competir con los demás en la gala de eliminación.
Así, la segunda placa definitiva de nominados quedó conformada por los siguientes nombres: Renato Rossini (fulminado), Martina Pereyra (fulminada), Ulises Apóstolo, Santiago Algorta, Luciana Martínez y Keila Sosa.