El sábado 24 de mayo se conoció el fallecimiento de Luciano Ojeda, quien fuera pareja de la reconocida cantante Gladys «La Bomba Tucumana». La triste noticia llega después de un largo período en el que el joven batalló contra un agresivo cáncer. Durante ese tiempo, la artista compartió públicamente momentos de gran intimidad, en los que mostraba cómo acompañaba a su pareja en el proceso médico y difundía palabras cargadas de amor y fortaleza.
Uno de los momentos más conmovedores quedó registrado en un video que Gladys publicó en su cuenta de Instagram. En las imágenes se ve a Luciano internado, atravesando estudios clínicos. En medio del registro, se escucha la voz de la cantante preguntándole: “¿Qué me estabas diciendo vos?”. A pesar de encontrarse bajo los efectos de la medicación, el joven expresó con claridad: “Que te amo. En serio. No son los opioides que me están haciendo hablar y decir la verdad. Pero te juro que no… no tengo nada para darle a nadie, mi amor. No me quedé con nada. Te amo tanto. Me siento bien. Mi esposa hermosa”.
Entre risas y ternura, Gladys respondió con palabras llenas de cariño: “Qué lindo que estás, mi amor. Lo bonito que se te vea acá. Dejá de resistirte a las drogas, dormite”. Con una mezcla de humor y admiración, añadió: “Hermoso. Qué lindo que estás. ¿Vos sos Highlander?”. A lo que Luciano, haciendo alusión a la icónica figura del inmortal guerrero de cine, contestó: “Sí, sí, se dice que soy Highlander. Para matarme a mí se necesita o dispararme con bala de plata o una estaca en el corazón o… este… ¿Cómo es la otra? O cortarme la cabeza con una espada, como Highlander. Sean fuertes, no se rindan nunca”.
En el posteo, Gladys también mostró una escena de su pareja realizando el tratamiento, y le dedicó un mensaje lleno de aliento y devoción: “Mi amor, mi guerrero, vamos ¡Fuerza, mi amor! Sos un gran luchador, un hombre muy valiente. Lo estás dando todo. Admiro tu gran fortaleza ante todas las cosas que estás pasando. Vamos que Dios nuestro señor no te abandona nunca, mi Chano. Gracias a todos los que hagan oraciones para que vos sigas adelante mi vida».
El fallecimiento de Ojeda, ocurrido a los 38 años, fue confirmado públicamente por su hermano Matías a través de una publicación en redes sociales. El joven, especialista en salud e higiene, venía enfrentando la enfermedad desde hacía varios años, lo que incluyó una intervención quirúrgica en la que le fue extraído un riñón.
Durante una entrevista que Gladys concedió a Carmen Barbieri en mayo del año anterior, relató con gran emoción cómo fue el inicio de su relación con Luciano y cómo la enfermedad marcó su camino. La artista rememoró que ya eran pareja cuando él tuvo que ser operado por segunda vez, debido a un tumor de ocho kilos en su abdomen. Cuatro meses después, al presentarse una nueva complicación, Luciano decidió terminar la relación. Según contó Gladys, el médico que lo atendía le dio un pronóstico desalentador, casi sin esperanzas. El propio Luciano le dijo entonces: “Esta chica no se merece nada de lo que estoy viviendo”.
Afectada por la dureza de ese recuerdo, la cantante explicó que, en su afán de permanecer a su lado, le pidió a su pareja que le permitiera acompañarlo en ese momento tan doloroso. “No quería que yo lo viera pasando por un quimio. Cuando yo volví él ya se había ido, se había llevado sus cosas. Estuvimos separados cuatro meses. La pasé tan mal, sufrí tanto, le imploré tanto a Dios y a él que me dejara estar a su lado. Que después hiciera lo que quisiera, pero que me dejara acompañarlo”, recordó.
Antes de esa entrevista, Gladys ya había hecho pública la situación de salud de su pareja, revelando que él le había pedido alejarse para no exponerla al sufrimiento. “Tuvimos una historia de amor como nunca en mi vida. Es la primera vez que amo de verdad a alguien, y tuve la desgracia y él también, de que se enfermara y quisiera atravesar su enfermedad solo. Él está enfermo y no quiere que nadie lo acompañe y yo estoy quebradísima, muerta en vida”, expresó en aquel entonces, con la voz entrecortada por el dolor.
En medio de esa lucha, la artista destacó que lo único que le daba consuelo era poder seguir cantando. “Está enfermo de cáncer. Tiene apenas 37 años y es algo totalmente fuerte que nunca me imaginé que podía llegar a pasar. Lo único que me hace bien y me salva es ir a cantar”, dijo conmovida.
Con el paso del tiempo, Luciano recapacitó y permitió que Gladys volviera a su vida. En una muestra de gratitud, le dedicó unas palabras llenas de emoción, que acompañó con imágenes del tratamiento: “Gracias por insistir, gracias por no bajar los brazos, gracias por acompañar y estar a pesar de las duras, nefastas y catastróficas adversidades que se me presentaron atentando contra la hermosa vida llena de amor sano y sincero que estábamos construyendo juntos”.
El vínculo entre ambos quedó sellado como una historia de amor marcada por la adversidad, el compromiso emocional y la resiliencia. La despedida de Luciano dejó una huella profunda no solo en la vida de Gladys, sino también en todos aquellos que fueron testigos de su lucha.
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