Roberto García Moritán y Mirtha Legrand protagonizaron un tenso intercambio durante la emisión de La Noche de Mirtha (eltrece) el pasado fin de semana, después de que la conductora preguntara al exfuncionario sobre su separación de Carolina “Pampita” Ardohain. A pesar de las tensiones del programa, García Moritán decidió emitir un mensaje en sus redes sociales, específicamente en su cuenta de Instagram, para aclarar lo sucedido.
En su publicación, el exfuncionario compartió una serie de imágenes de su participación en la mesa de La Chiqui y expresó su respeto y cariño hacia Mirtha Legrand, a quien definió como “siempre incisiva y generosa”, agradeciéndole la invitación al programa. Además, subrayó la importancia de proteger a su familia y explicó que, debido a la situación personal que vivió, optó por centrarse en compartir lo que había vivido, sin entrar en detalles profundos sobre su separación para preservar su entorno. Cerró su mensaje con un comentario en el que expresó que ahora se concentraba en lo que venía a futuro.
El intercambio entre ambos comenzó cuando Mirtha, sin rodeos, le dijo a Moritán: “Qué guerra nos has dado”, a lo que él respondió con firmeza: “No te la voy a hacer fácil, Mirtha, porque tengo una visión muy distinta a la tuya”. Posteriormente, la conductora no tardó en abordar el tema de la separación, preguntándole directamente sobre los motivos detrás de la misma y si había sido infiel. Moritán, visiblemente afectado, relató lo difícil de la situación, confirmando que el proceso había sido «brutal» para él.
Aunque el exfuncionario intentó redirigir la conversación hacia la presión política que había vivido, Mirtha insistió en la crisis matrimonial, señalando que, en su opinión, ese tema era el centro de la atención. Moritán aprovechó para explicar que la relación con Pampita atravesó una etapa difícil debido a lo que él consideraba una «violenta operación política» que no solo afectó su vida profesional, sino también su vida personal. Aseguró que fue atacado injustamente por un periodista que lo acusó de corrupción, lo que, según él, desestabilizó tanto su carrera como su relación con la modelo.
Pese a los intentos de Moritán por desvincular su divorcio de la política, Mirtha se mostró escéptica y volvió a interrogarlo sobre rumores de infidelidades, específicamente sobre la posibilidad de que Pampita hubiera encontrado llamadas de otra persona en su teléfono. Moritán negó rotundamente estas acusaciones, aunque la conductora se mostró incrédula, repitiendo que “Carolina no miente nunca”. Moritán continuó insistiendo en que las versiones que circulaban eran “mentiras” y que la separación se debió a “momentos difíciles” por los que ambos pasaron.
Mirtha, sin embargo, no dejó de presionar sobre el tema, argumentando que la separación de una figura tan pública como Pampita era lo que realmente interesaba a la gente, más allá de la función pública de Moritán. A pesar de que él intentó centrar la conversación en su renuncia como ministro, la conductora le recordó que, por mucho que él fuera un político, la atención del público se centraba en su matrimonio con la famosa modelo.
Al final del programa, Moritán prefirió ser reservado sobre su vida personal y la de su familia, aclarando que, debido al daño que se les había causado, su responsabilidad era mantenerse discreto. A través de sus palabras en las redes sociales, quiso dejar claro que su silencio era una manera de proteger a los suyos. Sin embargo, Mirtha no se detuvo en su insistencia y volvió a señalar que, en definitiva, la atención recaía sobre su vida privada y no en su carrera política, algo que él no parecía poder eludir.
