La dificultad que muchas figuras del espectáculo muestran al enfrentar comentarios negativos de parte de sus propios seguidores no es un fenómeno aislado ni reciente. Se trata de una relación compleja entre quienes viven de la exposición pública y las críticas que reciben en los espacios digitales. En ese contexto, no son pocos los artistas que responden con molestia o intolerancia ante cualquier opinión desfavorable. Un ejemplo reciente vuelve a ser Eugenia “la China” Suárez, quien ha dejado en claro en numerosas oportunidades que las observaciones que cuestionan su imagen personal la afectan profundamente.
En el universo de la comunicación actual, plataformas como Instagram o X cumplen un rol central, ya que ahí se comparte no solo el trabajo de los famosos, sino también aspectos íntimos y emocionales de su vida diaria. La actriz, hoy vinculada sentimentalmente con Mauro Icardi, participa activamente de esta dinámica; sin embargo, su reacción suele ser muy impulsiva cuando otras mujeres critican su apariencia física.
Durante las últimas horas, Suárez tomó una decisión que encendió aún más la polémica: comenzó a publicar capturas de los mensajes ofensivos que recibía junto con el rostro de quienes los enviaban. Todo acompañado de una frase que repitió como un eslogan: “no podés ser fea y mala”. Con esa devolución buscó degradar a sus detractoras y marcar que, desde su punto de vista, quienes la atacan lo hacen por envidia o frustración.
La actitud de la actriz generó revuelo inmediato. En el ambiente mediático, muchos cuestionaron el tono agresivo de su respuesta y señalaron que, lejos de apagar el conflicto, Suárez solo consiguió alimentar nuevas críticas hacia su comportamiento en redes.
Para culminar su serie de publicaciones, subió un video en el que se la ve quitándose el maquillaje mientras se escucha una voz en off reafirmando el mensaje: “No podés ser fea y mala. Podés ser linda y mala, pero no fea y mala. Cuando sos fea no te podés dar el lujo de ser mala: tenés que esforzarte en tener personalidad. La cantidad de envidiosas con cara larga tirando veneno…”.
Junto al material, escribió un cierre irónico: “Buenas noches”, acompañado por un emoji de risa. Luego agregó un comentario en referencia a su vida personal: “Me espera el amor de mi vida en la camita, mis hijos ya duermen y yo también tengo sueño. Descansen”.