Durante la 27ª edición de los Premios Carlos Gardel, organizados por la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (CAPIF), la cantante y actriz Lali Espósito fue una de las grandes protagonistas de la noche al consagrarse en tres importantes categorías: “Mejor Videoclip Corto”, “Mejor Canción de Pop” y “Canción del Año”. El reconocimiento fue otorgado por su éxito “Fanático”, un tema que no solo destacó por su calidad artística, sino también por haber generado amplio debate público debido a sus referencias directas y críticas veladas al presidente Javier Milei.
Al subir al escenario para recibir uno de los galardones, Lali aprovechó la oportunidad para emitir un discurso cargado de contenido emocional y político, dirigido especialmente a su audiencia más fiel y también, en parte, a quienes se sintieron aludidos por la polémica suscitada por la canción. En sus palabras, la artista dedicó el premio a “los fanáticos que saben dónde colocar su amor” y también, irónicamente, a quienes “lo colocan en un lugar de mierda”.
“Quiero compartir este premio con esos fanáticos que están siempre, que acompañan con pasión genuina, que acampan para ver un show, que están presentes en cada momento, que bancan lo que uno hace y que hasta defienden en redes sociales cuando hace falta. También se lo dedico —con amor, pero sin dejar de decir lo que pienso— a esos fanáticos que no entienden todavía cómo canalizar ese amor y terminan volcándolo en lugares oscuros o dañinos. Para todos ellos, esta canción también va como un mensaje directo”, expresó con claridad y contundencia.
Lali continuó su discurso señalando que el arte, al igual que los procesos sociales y políticos, debe entenderse como un fenómeno colectivo. “El arte no es algo individual. Tampoco lo es la salida de cualquier situación adversa. Todo lo que implique avanzar, sanar o resistir, se hace entre todos. Pensar que uno puede solo en este mundo es un error, desde mi humilde opinión. Por eso, más allá de las diferencias, creo en la fuerza del encuentro, del hacer conjunto”, reflexionó la artista, visiblemente emocionada.
Finalmente, cerró con una nota esperanzadora, destacando la importancia de la música y del arte como herramientas de acompañamiento emocional en tiempos difíciles. “Mientras tanto, sigamos creando. Sigamos haciendo música, cosas lindas, cosas que acompañen, que abracen, que le digan a la gente que no está sola. Porque no lo estamos. Y eso, hoy más que nunca, vale oro”, concluyó ante los aplausos del público.
Su intervención, al igual que su canción “Fanático”, no solo dejó una huella en la gala, sino que reafirmó el lugar de Lali como una de las voces más influyentes del pop argentino contemporáneo, capaz de combinar talento artístico con compromiso social y posicionamiento político.
