El esperado desenlace de Gran Hermano tuvo lugar este martes 24 de junio, cerrando una edición repleta de momentos emotivos, intensas vivencias y reconocimientos para los protagonistas que cautivaron a la audiencia durante meses. La velada final, transmitida por la pantalla de Telefe, culminó con la consagración de Santiago “Tato” Algorta como el gran ganador del certamen, obteniendo el privilegio simbólico de ser el último en abandonar la casa y apagar sus icónicas luces, gesto que representa el cierre definitivo de esta inolvidable etapa.
Previo a este desenlace, la tensión aumentó con la salida de Eugenia Ruiz, quien quedó fuera de la contienda a instancias de la votación del público. Su eliminación dejó como finalistas a tres jugadores que lograron conquistar al público y mantenerse firmes hasta el final: Luz Tito, Ulises Apóstolo y el uruguayo Tato Algorta. Cada uno representaba una estrategia distinta, una historia única y un perfil muy marcado dentro del juego.
La expectativa era alta, y los seguidores del programa se volcaron masivamente a votar. Finalmente, fue Santiago Algorta quien se impuso con contundencia, alcanzando un abrumador respaldo de más del 62% de los votos positivos emitidos por el público, que lo eligió como el merecido campeón de esta edición. Su triunfo no solo lo convierte en el flamante ganador de Gran Hermano, sino también en uno de los participantes más queridos y destacados de esta temporada.
Así, con emociones a flor de piel, aplausos y abrazos, Gran Hermano cerró una nueva etapa, dejando a Tato como el último habitante de la casa más famosa del país y como figura central de esta emocionante historia televisiva.
