El gendarme argentino Nahuel Gallo, detenido en Venezuela desde el 8 de este mes, continúa en paradero desconocido mientras el gobierno venezolano guarda silencio sobre las razones de su retención. En respuesta, el Ministerio de Seguridad de Argentina difundió documentación oficial que prueba que el ingreso de Gallo al país caribeño había sido previamente autorizado por las autoridades venezolanas a fines de noviembre. El propósito de su viaje era estrictamente personal y recreativo: visitar a su pareja, María Alexandra Gómez García, y a su hijo.

Caso Gallo: el certificado que comprobaría el aval del chavismo a la visita del gendarme a su pareja y su hijo.
Uno de los documentos presentados por las autoridades argentinas incluye una carta de invitación emitida por Gómez García y certificada por el Servicio Autónomo de Registros y Notarías de Venezuela, organismo dependiente de la Vicepresidencia del gobierno de Nicolás Maduro. En la carta, fechada dos semanas antes del viaje, se especificaba que Gallo permanecería en Venezuela entre el 7 y el 30 de diciembre, alojándose en el departamento de su pareja, ubicado en Puerto La Cruz, a unos 325 kilómetros de Caracas. Gómez García detalló además que Gallo es su pareja desde hace cinco años y padre de su hijo menor, dejando claro que el viaje no tenía fines laborales ni políticos. Para tramitar la autorización, la pareja abonó las tasas correspondientes, lo cual consta en los registros oficiales.
Por otra parte, el Ministerio de Seguridad también presentó un documento que demuestra que, el 21 de noviembre, la dirección de personal de Gendarmería Nacional autorizó a Gallo a ausentarse del país desde el 5 de diciembre hasta el 3 de enero. Este permiso refuerza la postura argentina de que el viaje tenía un carácter puramente personal y no estaba vinculado a actividades de seguridad o inteligencia.
Estas pruebas contrastan con las acusaciones realizadas por el gobierno venezolano. Diosdado Cabello, vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela y uno de los principales referentes del régimen de Maduro, señaló que Gallo estaba involucrado en un supuesto plan para facilitar la salida de opositores al chavismo que se encuentran asilados en la embajada argentina en Caracas desde marzo, actualmente bajo la bandera brasileña.

Invitación de Extranjeros a Venezuela Caso Gallo.
La situación generó aún más controversia luego de que Oscar Laborde, exembajador argentino en Venezuela y cercano al kirchnerismo, criticara públicamente a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. En declaraciones al diario La Nación, Laborde cuestionó la legalidad de las autorizaciones para el viaje de Gallo, sugiriendo que hubo irregularidades en los procedimientos. “No está claro quién emitió la autorización para su salida del país, ni si se notificó al agregado de Gendarmería en Colombia o a las autoridades venezolanas sobre su ingreso. Todo esto generó sospechas y complicó la situación del gendarme”, afirmó Laborde.
En respuesta, el Ministerio de Seguridad argentino desestimó las declaraciones del exdiplomático, calificándolo de “personero del régimen chavista”. Además, remarcaron que, incluso en el improbable caso de que las autorizaciones no hubieran estado en regla, lo procedente habría sido la expulsión del país, no su detención y desaparición. Según fuentes oficiales, la difusión de estos documentos busca contrarrestar las acusaciones infundadas y presionar para la liberación inmediata de Gallo, cuya detención sigue siendo motivo de tensión diplomática entre ambos países.