Estados Unidos se desmarca y señala que Israel actuó por cuenta propia en el ataque a Irán

En un contexto marcado por la creciente tensión en Medio Oriente, tras una ofensiva israelí contra infraestructuras vinculadas al programa nuclear iraní, el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, salió públicamente a aclarar la posición de su país respecto al conflicto. En un comunicado difundido por la Casa Blanca, Rubio calificó la acción israelí como una “decisión unilateral” y remarcó que Estados Unidos no tuvo intervención en dicha operación.

Rubio detalló que la administración estadounidense no estuvo involucrada en el ataque ejecutado por el gobierno israelí contra Irán y subrayó que, ante todo, la prioridad de su país en la región es salvaguardar la integridad y seguridad de sus tropas desplegadas. “Israel llevó a cabo esta acción por cuenta propia. Nuestra principal responsabilidad en este momento es proteger a nuestras fuerzas militares destacadas en Medio Oriente”, expresó Rubio en su declaración.

Asimismo, el funcionario indicó que el gobierno del presidente Donald Trump mantiene una vigilancia constante y estrecha coordinación con sus aliados regionales, sin dejar de advertir al régimen iraní que cualquier agresión contra el personal o los intereses estadounidenses será considerada una grave provocación. “Estamos en comunicación continua con nuestros socios estratégicos en la región. Irán debe abstenerse de tomar represalias contra personal o activos de Estados Unidos”, puntualizó el jefe de la diplomacia estadounidense.

Mientras se producían explosiones en la ciudad de Teherán, el presidente Trump se encontraba en el jardín de la Casa Blanca compartiendo una charla con legisladores. Según informaron medios locales, el mandatario no interrumpió sus actividades, continuando con saludos y fotos con congresistas, lo que generó incertidumbre respecto a si estaba al tanto de la situación en ese momento.

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, defendió la ofensiva y afirmó que su país no cesará las operaciones mientras considere que la amenaza iraní persiste. En un discurso televisado, aseguró que las acciones militares se prolongarán «el tiempo que sea necesario para neutralizar completamente el riesgo representado por Irán».