Christian Steffen, un ciudadano alemán de 53 años con doctorado en Filosofía y experiencia como consultor en recursos humanos, fue arrestado en España tras descubrirse que mantuvo a sus tres hijos encerrados durante cuatro años en una vivienda situada en las afueras de Oviedo. El caso, que ha generado una profunda conmoción en la sociedad española, fue revelado gracias a la intervención de una vecina que alertó a las autoridades sobre la preocupante situación.
Christian S., el doctor en filosofía que encerró a sus tres hijos durante cuatro años en una casa de Oviedo, España.
Los niños involucrados —un par de gemelos de ocho años y su hermano mayor, de diez— vivían en condiciones marcadas por un control extremo. De acuerdo con lo establecido en la investigación judicial, los menores no solo tenían prohibido salir de la casa, sino que tampoco se les permitía utilizar el baño normalmente. En su lugar, eran obligados a llevar pañales y a obedecer rutinas rígidamente estipuladas. Dormían en cunas, incluso a pesar de su edad, y pasaban los días en un ambiente lleno de suciedad, sin ningún tipo de contacto con el exterior.
El deterioro físico de los chicos fue confirmado por un informe médico que indicó la presencia de un fuerte estreñimiento, causado por las severas restricciones impuestas. El domicilio, que en el pasado había sido propiedad de un futbolista profesional, se encontraba ahora en condiciones deplorables e insalubres, representando un claro riesgo para la salud y el bienestar de los menores.
Las medidas de aislamiento extremo impuestas por la familia estaban motivadas, según se determinó, por un temor desproporcionado al contagio de Covid-19. Tanto Steffen como su esposa, Melissa Ann Steffen —de origen alemán con ascendencia estadounidense y mexicana—, habían llegado a España en 2021, en plena pandemia, y desde entonces impusieron un estilo de vida basado en el aislamiento y el control absoluto sobre sus hijos.