Ezra Vandan, una conocida modelo turca en la plataforma Only Fans, fue arrestada por el Departamento de Moralidad de la Policía de Estambul después de que una publicación en la red social X generara controversia y un intenso debate sobre los límites de la moralidad y la libertad individual. En su mensaje, Vandan, quien se hace llamar Acnoctem en las redes, reveló que su objetivo era batir el récord nacional de acostarse con 100 hombres en un plazo de 24 horas, y que posteriormente aspiraba a romper también el récord mundial. «¡Mi meta es romper el récord primero en Turquía y luego en todo el mundo! Voy a comenzar con 100 hombres en 24 horas», expresó sin rodeos en una de sus publicaciones. En otro post, la modelo volvió a reafirmar su deseo, pidiendo apoyo para llevar a cabo esta hazaña y expresando su disposición a vivir esta experiencia como un placer.
Su afirmación, junto con varios comentarios relacionados con los valores en cambio de la sociedad, el trabajo sexual y las relaciones personales, se viralizó rápidamente en X, donde miles de personas dejaron sus opiniones sobre el tema. Sin embargo, la atención no solo fue mediática; las autoridades también se involucraron. Un juez emitió una orden de arresto contra Vandan y su esposo, Pedram Behdar Vandan, tras descubrir que ambos habían compartido contenido pornográfico en sus redes sociales, específicamente de un sitio web prohibido en Turquía. Los cargos fueron de «obscenidad» y «resistencia a la autoridad», ya que se acusó a la pareja de dificultar el cumplimiento de la ley.
Vandan, de 22 años, no solo enfrentó este arresto sino que también tiene antecedentes penales previos. Después de su liberación, regresó a las redes sociales para denunciar lo que consideró un trato injusto por parte de las autoridades, señalando malos tratos durante su detención. También aprovechó para criticar al Gobierno turco por sus restricciones sobre el estilo de vida de la sociedad. «Puede que me llamen ‘puta’ por lo que hago, pero los derechos humanos, la ley y la justicia también aplican para una ‘puta'», declaró, desafiando las críticas.
Además, la joven expresó su desacuerdo con la intervención del Estado en la vida de las mujeres, defendiendo su derecho a tomar decisiones sobre su propio cuerpo sin la intromisión de las autoridades. Afirmó que no se dedica a la prostitución ni realiza actos sexuales a cambio de dinero, y cuestionó cómo el Estado podía invadir de esa forma la libertad de una mujer. Para reforzar su postura, Vandan publicó una foto semidesnuda, asegurando que uno de los agentes de policía la había tomado sin ofrecer resistencia, lo que añadió un toque de ironía a su denuncia.