🔨😡 Vandalizan estatua de Messi en Mar del Plata en medio de polémicas con Tapia y la AFA

Un hecho vandálico conmocionó el centro de Mar del Plata durante la madrugada del domingo, cuando la estatua de Lionel Messi, símbolo de su consagración en la Copa del Mundo, apareció partida en dos. La escultura, ubicada en la esquina de Moreno y Santa Fe frente al restaurante temático El Nuevo Mundial, mostraba el torso apoyado sobre las piernas y la Copa del Mundo destruida en pedazos, con evidentes marcas de golpes que evidenciaban la violencia del ataque.

Este episodio se produce en un contexto de creciente polémica en torno a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), aunque no hay pruebas que vinculen directamente el acto vandálico con la situación institucional del fútbol argentino. Para Daniel, dueño del restaurante cercano, el hecho genera una profunda angustia, ya que no es la primera vez que la estatua sufre daños: “Esta es la segunda vez que pasa. Hace unos dos años, después del Mundial de Qatar, le arrancaron la cabeza a la estatua”, relató a Diario La Capital. La escultura, emplazada en 2018, se había convertido en un atractivo turístico y en un punto obligado para los hinchas que buscaban fotografiarse con la imagen del ’10’.

El ataque a la estatua de Messi se suma a una serie de agresiones recientes contra homenajes a futbolistas, como el mural de Ángel Di María en su club de infancia en Rosario, lo que genera la sospecha de un patrón de ataques dirigidos a símbolos asociados indirectamente a la actual conducción de la AFA en la calle Viamonte. Sin embargo, estas acciones contrastan con la actualidad deportiva del astro argentino, que continúa acumulando logros: horas antes, se consagró campeón de la Conferencia Este con Inter Miami y se prepara para disputar la final de la MLS.

Mientras tanto, desde el restaurante y junto al escultor Rodolfo Bayón, se evalúa la posibilidad de reconstruir la figura para que pueda seguir acompañando a los fanáticos de Messi de cara al Mundial de 2026. El ataque deja en evidencia no solo la vulnerabilidad de los homenajes públicos, sino también la tensión que envuelve al fútbol argentino en estos tiempos.