Claudia Laura Decurgez, de 44 años, salió el sábado por la mañana de su casa en Santo Tomé, Santa Fe, con rumbo a su primer día de trabajo como empleada de limpieza en una propiedad ubicada a unas 15 cuadras. Eran las 8:00 a.m. cuando tomó su bicicleta para recorrer lo que parecía ser un trayecto cotidiano, pero que terminó en tragedia a tan solo 400 metros de su hogar. En una calle de tierra, fue atropellada por una camioneta Ford Ranger, cuyo conductor era Nico Mattioli, de 31 años, cantante e hijo del reconocido Leo Mattioli, ícono de la música tropical. La colisión fue fatal, causándole la muerte de manera instantánea. Las imágenes capturadas en video son de alta sensibilidad.
El siniestro tuvo lugar en la calle Richieri, cerca de la intersección con Libertad. En el video se puede observar que Decurgez circulaba por su derecha, respetando las normas, cuando fue embestida violentamente por la camioneta que transitaba a gran velocidad. Al presenciar el accidente, un vecino se acercó rápidamente para intentar ayudar, mientras que Mattioli también se detuvo para llamar a una ambulancia, pero lamentablemente, no pudieron hacer nada para salvarla.
Claudia era madre de tres hijos: un joven de 24 años, una adolescente de 15 y un niño de 10. Además, formaba parte de una familia numerosa con cinco hermanos, aunque había perdido a sus padres en los últimos diez años. Tras el trágico suceso, Mattioli fue arrestado, pero horas después, cerca de las 17:30 del mismo día, fue liberado tras prestar declaración.
[AHORA] Este es el video que complica a "Nico" Mattioli por la muerte de Claudia Decurgez en Santo Tomé, Santa Fe: el cantante atropelló a la ciclista y se entregó.
— ElCanciller.com (@elcancillercom) September 23, 2024
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Posibles consecuencias legales para Nico Mattioli
En los días posteriores al incidente, se llevará a cabo la audiencia imputativa, en la que probablemente se lo acuse de «homicidio culposo», un delito que conlleva penas de entre 1 y 5 años de prisión. Sin embargo, dicha pena podría aumentar hasta los 10 años si se consideran ciertos agravantes, como la velocidad excesiva a la que circulaba el conductor o el hecho de que la camioneta no contaba con los espejos retrovisores reglamentarios.
La familia de Decurgez exige justicia por la muerte de Claudia. «Ella iba correctamente por el borde de la calle, mientras que este hombre conducía a gran velocidad, casi sobre la banquina», señalaron familiares. Además, destacaron que la camioneta pertenecía a la hermana de Mattioli, quien tiene una discapacidad visual en uno de sus ojos, lo que agrava aún más la situación. La investigación inicial está a cargo del fiscal Roberto Apullán, aunque el caso podría ser transferido a la Unidad Fiscal Especial de Accidentes de Tránsito para un análisis más exhaustivo.