Laudelina Peña durante su declaración mencionó varios detalles clave sobre la desaparición de Loan. Méndez, quien colaboró desde el día después de la desaparición, relató cómo encontró el rastro del niño en el monte y alertó a las autoridades. Según Méndez, al hallar las huellas de Loan, inmediatamente contactó al comisario Maciel, a quien conocía por su trabajo previo en la policía. Méndez describió el momento en que, tras hacer la llamada, varias personas salieron del monte y comenzaron a preguntar por la zapatilla de Loan, mientras que el abuelo del niño, Capi Benítez, confirmó el rastro en el barro.
Durante el interrogatorio, Laudelina Peña vinculó a Méndez repetidamente con la posible implicación en la desaparición, sugiriendo que podría haber sido él u otras personas como Ramírez quienes podrían haberse llevado a Loan. También mencionó una supuesta alerta inicial sobre el hallazgo de Loan en una tapera, que resultó ser una falsa alarma según informaciones posteriores.
En cuanto a la personalidad de Loan, Laudelina describió al niño como inquieto y apurado, con poca interacción familiar frecuente.