En la provincia de Mendoza se vivió una situación de extrema tensión luego de que una alumna de 14 años ingresara armada al colegio 4-042 Marcelino H. Blanco, en la localidad de La Paz, y efectuara al menos tres disparos dentro de las instalaciones. Las primeras imágenes del hecho comenzaron a circular rápidamente en redes sociales, mostrando a la joven desplazándose por los pasillos con una pistola en la mano, mientras que en otros videos se escuchan los estruendos que habrían provenido desde un aula.
De acuerdo con la información difundida por medios mendocinos, la estudiante permanecía atrincherada en el establecimiento escolar al momento de reportarse los hechos. Ante esta situación, se dispuso un amplio despliegue de seguridad que incluyó el envío de un helicóptero perteneciente al Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS), que partió desde la Base Cóndor con destino a La Paz para colaborar en el operativo.
Desde el Ministerio de Educación, Cultura, Infancias y DGE emitieron un comunicado oficial en el que pidieron expresamente a la población evitar acercarse a la zona de la escuela, remarcando que lo primordial era garantizar la seguridad de la adolescente y de su entorno. “Está trabajando el comité de crisis con los profesionales y equipos especialistas. En este contexto, cualquier alteración externa o por fuera de los protocolos podría tener consecuencias graves”, advirtió el texto difundido por las autoridades.
Mientras tanto, en el lugar se montó un operativo de emergencia y se procedió a la evacuación de los alumnos y el personal docente. En diálogo con el canal C5N, el periodista Ignacio Tula confirmó que efectivos del grupo GRIS continuaban negociando con la menor, intentando persuadirla para que deponga su actitud y entregue el arma, la cual habría sido tomada de su padre, un miembro de la fuerza policial de la provincia de San Luis.
Uno de los videos registrados en el interior del establecimiento muestra cómo un agente de la policía ingresa y le pide a la joven que deje el arma en el suelo “aunque sea un minuto, para poder hablar”. Acto seguido, se escucha un disparo, lo que genera un clima de desesperación reflejado en los gritos de los presentes, entre los cuales se distinguen frases como “¡No, corazón, no!”.
Por su parte, en declaraciones a Radio 10, el intendente de La Paz, Fernando Ubieta, manifestó la preocupación de toda la comunidad: “Estamos desde hace dos horas esperando que logren disuadirla. La verdad es que es una situación muy triste, muy dolorosa, especialmente para un departamento tan pequeño como el nuestro”.
Este grave episodio mantiene en vilo a los habitantes de la zona, quienes aguardan que las autoridades logren resolver la crisis de manera pacífica y sin consecuencias mayores, mientras crece la conmoción por un hecho inédito en la localidad.
