El oficial de policía bonaerense, Juan Alberto García Tonzo, que disparó contra Bastián Escalante Montoya durante un tiroteo con delincuentes, ha sido liberado. Esta decisión ha generado una fuerte reacción por parte de la familia del menor, quien falleció el 10 de julio en Wilde, y su abogado, Matías Morla, ha anunciado que apelará la medida.
García Tonzo, de 30 años y miembro del Comando de Patrullas de Avellaneda, estaba bajo arresto acusado de «homicidio cometido con arma de fuego en contexto de exceso en legítima defensa». La jueza Estela del Carmen Mollo, del Juzgado de Garantías 2 del Departamento Judicial Avellaneda-Lanús, decidió otorgarle la libertad bajo ciertas condiciones, ya que el oficial no tiene antecedentes penales, siempre estuvo disponible para la Justicia y ha presentado un domicilio fijo, lo cual, según el fallo, asegura que no interferirá en la investigación. No obstante, deberá presentarse semanalmente ante el tribunal y su incumplimiento podría resultar en cargos por «desobediencia».
Las investigaciones realizadas por la Policía Federal indicaron que las ocho vainas encontradas en la escena del crimen coincidían con el arma de García Tonzo, una pistola semiautomática calibre 9×19 mm, marca Bersa, modelo TPR9. El informe del fiscal Juan Ignacio Colazo confirmó que todas las vainas estaban disparadas por esta pistola. Además, las imágenes de cámaras de seguridad mostraron que los delincuentes no dispararon contra el oficial; en cambio, huyeron cuando él comenzó a disparar.
En respuesta, el abogado de la familia de Bastián, Matías Morla, ha solicitado que se modifique la acusación contra García Tonzo a «homicidio agravado», argumentando que la conducta del oficial resultó en la muerte del niño y que su familia está devastada por la pérdida.