Marcelo Longobardi volvió a tocar el tema de su salida de Radio Rivadavia a fines del año pasado, brindando detalles sobre las presiones que, según él, recibía por parte de Karina Milei, hermana del presidente. En una entrevista con Cenital, Longobardi comentó que el dueño de la radio, Marcelo Fígoli, le confesó que la emisora se encontraba bajo una fuerte presión por parte de Karina, aunque le pidió que no se preocupara. Esto, según el periodista, desató su abrupta salida de la radio.
En su conversación con Ernesto Tenembaum y María O’Donnell, Longobardi también reflexionó sobre los ataques del presidente contra él y su colega Carlos Pagni. Recordó cómo Javier Milei, a través de su cuenta de X, publicó un mensaje lleno de insultos hacia ellos, describiéndolos como «garcas hijos de puta» por expresar sus opiniones. Este ataque llevó a Longobardi a reaccionar públicamente, pidiendo apoyo a su compañero Jonatan Viale, pero sintió que no recibió respaldo ni de la radio ni de Viale. Esto lo motivó a suspender el pase de programa con Viale.
Además, el periodista contó que le envió un mensaje al presidente Milei, mientras se encontraba en Escocia, tras recibir otro insulto, pero no obtuvo respuesta. En ese mensaje, Longobardi mencionó que le estaba escribiendo desde “la tierra de nuestro admirado Adam Smith, tierra de gente educada”. Este silencio por parte de Milei intensificó la atmósfera negativa en su contra.
Longobardi detalló cómo el conflicto escaló hasta que la radio lo despidió, considerándolo como un despido aún más complicado que el que vivió con Cristóbal López en Radio Diez. Aunque la emisora tenía una cláusula que le permitía rescindir su contrato con 60 días de antelación, nunca se le notificó formalmente sobre su despido, lo que hizo que la situación fuera aún más tensa.
El periodista también afirmó que el detonante de su salida fue una entrevista que hizo con Hugo Alconada Mon sobre la investigación de Andrés Vázquez, un funcionario del gobierno. Según Longobardi, esa entrevista fue el punto culminante de un conflicto ya existente, pues consideraba que la radio estaba buscando excusas para despedirlo desde antes.
Por otro lado, expresó que Javier Milei tiene una obsesión con él y que no tolera las críticas, especialmente por parte de personas que podrían tener afinidad con algunas de sus ideas. Longobardi mencionó que el presidente espera que los medios se sometan a su gobierno y que la prensa debe ser una herramienta controlada o subordinada al poder.
Finalmente, sobre su despido, Longobardi señaló que fue una decisión tomada tras más de un año al aire con su programa «Esta Mañana». Aunque la radio justificó su salida debido a la falta de presencia física del periodista en los estudios, ya que pasa parte del año en Miami, Longobardi no estuvo de acuerdo con esta explicación y consideró que su salida estuvo más relacionada con las presiones políticas que con cuestiones profesionales. Además, aprovechó la oportunidad para criticar a otros periodistas como Luis Majul, a quien acusó de formar parte del coro oficialista y recibir pauta del Gobierno.